Un grupo de 20 alumnos de 3 a 11 años sale todos los días del colegio público profesor Sanchis Guarner de Valencia a las 12.30 horas para peregrinar hasta una guardería que está a más de 500 metros de distancia para poder comer. Ya llevan dos años así.

El colegio no tiene comedor y los padres se ven obligados a aguzar el ingenio y a recurrir a planes alternativos para no dejar de trabajar, como explica Emilia Castro: «El pasado año, mi hijo tuvo que ir a la guardería porque no tenía con quién dejarlo».

Los niños, durante el trayecto, disponen de un único cuidador, Javier, contratado por el jardín de infancia. «Voy con mucho ojo, los niños más grandes dirigen a los pequeños durante el trayecto del centro a la guardería», explica Javier.

La asociación de padres y madres del Sanchis Guarner lleva desde 2002, año en que lo aprobó el Consejo Escolar, reclamando un comedor de 60 plazas para el colegio. Por ahora, ha sido en vano.

Comerán en la calle el miércoles

Los padres de los 205 alumnos que van al colegio público Sanchis Guarner comerán el miércoles, a las 12.30 horas, en la calle. Será su forma de reivindicar un comedor para el centro.

Una de las representantes de la asociación de padres y madres de alumnos, María del Carmen Narejos, cuenta: «Antes, sí que teníamos una instalación, pero se tuvo que utilizar como aula. Educación prometió comedor para este curso».

La Conselleria confirma que «hay un proyecto para poner en marcha el comedor lo antes posible».