El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (COVITE) denunció el pasado miércoles a los miembros de la familia de los dirigentes de ETA Ibon y Eneko Gogeaskoetxea después de que enterrasen a su padre, Gotzon Gogeaskoetxea, en un féretro envuelto por la bandera de ETA y entre vítores a la organización criminal.

Ibon, exjefe del aparato militar, y Eneko, exjefe del aparato logístico de la banda, enterraron a su padre el pasado 12 de junio en la localidad vizcaína de Busturia.

Según ha informado COVITE en una nota de prensa, decenas de personas, entre ellas niños, condujeron un ataúd envuelto en una bandera que lucía el logotipo de ETA y la inscripción "bietan jarrai", lema de la banda terrorista.

Además, se celebraron diversos actos de homenaje y exaltación a la organización terrorista, por lo que el colectivo ha decidido extender su denuncia a todas las personas que participaron en el funeral por un presunto delito de enaltecimiento del terrorismo y humillación a las víctimas.

CONVITE ha recordado en su escrito que el Tribunal Constitucional define el discurso de odio como “aquella forma de expresión que propaga, promueve o justifica el odio racial, la xenofobia y otras formas de odio basadas en la intolerancia, incluyendo la intolerancia manifestada mediante un nacionalismo y etnocentrismo agresivos como los que representa la organización terrorista ETA”.

Además, ha señalado que portar una bandera de ETA en un lugar público manifiesta una "clara voluntad de ensalzar a la organización terrorista y a sus miembros".