El grupo de atracos de la Jefatura Superior de Policía de Baleares ha detenido a dos personas de nacionalidad española acusadas de perpetrar cuatro asaltos con arma de fuego en Palma, uno de ellos en el interior de una vivienda, y de planear el asesinato de otro individuo.

Los arrestados son los varones D.A.N., de 29 años, y E.P.B, de 43, ambos con antecedentes, habituales consumidores de estupefacientes y supuestos autores de los delitos de robos con violencia e intimidación, detención ilegal, allanamiento de morada, tenencia ilícita de armas, conspiración para homicidio, sustracción de vehículo y falsedad documental.

Asimismo se ha detenido a una tercera persona por su supuesta participación en los dos últimos delitos, una mujer de 22 años identificada como V.M.P, también de nacionalidad española, según ha informado una portavoz policial.

Se da la circunstancia de que uno de los detenidos había salido de prisión el pasado 10 de octubre, tras cumplir una condena de tres años por robo con violencia e intimidación con arma de fuego y detención ilegal.

Atracos a mano armana

El primero de los atracos se produjo la noche del pasado 19 de octubre, cuando los dos acusados supuestamente encañonaron a una mujer que acababa de estacionar su vehículo, en cuya parte posterior viajaba su hijo de tres años. La mujer fue al cajero con uno de los atracadores para darles dinero, mientras el otro se quedó con el niño. De este modo, se hicieron con un botín de 300 euros, varias joyas y un teléfono móvil.

El segundo asalto se produjo la noche del 22 de octubre, cuando los dos individuos entraron en el segundo piso de un edificio en cuyo interior había dos mujeres. Días más tarde, asaltaron a otra mujer en un portal y le robaron tarjetas y dinero, también amenazándola a punta de pistola. Ese mismo día atracaron también a una pareja.

Las investigaciones han determinado también que los dos detenidos planeaban la muerte de un magrebí, bien "degollándolo o con un tiro", que realizaba tareas de desplazamiento al poblado de Son Banya para la compra de droga.

Para cometer los atracos los supuestos delincuentes se servían de dos armas, una escopeta recortada y una pistola detonadora que habían sido manipuladas para portar munición letal. En los registros practicados se han hallado además una escopeta de proyectiles y dos pistolas detonadoras.

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