Pero aquí, pese al cada vez más evidente despliegue de locales irlandeses (denominación que, por estos pagos, parece abarcar por igual a pubs ingleses, escoceses o gaélicos puros, y a la que te descuides alguna que otra cervecería alemana, simplemente por el despliegue maderero), un lugar como el John Mulligan & Co no resulta tan habitual como parece.

Desde el mismo escaparate, un despliegue de recuerdos (muñecas, radios antiguas, libros y botellas de JB) saluda desde cristales a los que el tiempo ha proporcionado una pátina esmerilada.

Dentro, la profusión maderera, con las paredes punteadas por cuadros típicos de un sitio así, acoge en sus dos plantas, con billar en la superior, una nutrida representación de la humanidad del sector preferentemente joven.

Por las tardes, la parroquia está más tranquila, arropada por una amplia selección musical como fondo y parapetada tras la profusión de recovecos del lugar, y defensora a ultranza de la intimidad propia e incluso de la ajena, salvo que se quiera conversar en la barra.

Allí atienden, turnándose, ya que el John Mulligan abre todos los días, sobre todo Cristina, Marina y Ana.

Pero cuando llega la noche, el asunto cambia un tanto, con despliegue de marcha nocturna, en un local que, desde su creación, hace siete años, parece haber sido elegido por todo tipo de visitantes anglosajones en la ciudad, y especialmente por los estudiantes acogidos a las becas universitarias Erasmus.

Café irlandés, pintas y hasta un aperitivo a partir de las ocho de la noche (o de una soleada tarde, en pleno verano) se escancian en tranquilidad o excitación sonora, según la hora, en el John Mulligan & Co, aunque, eso sí, siempre en compañía, que el lugar así lo pide.

* John Mulligan & Co, C/ López Torregrosa, 1, abierto desde las 15.00 horas hasta aproximadamente las 3.00 h. Precio medio por copa: entre 4,5 y 5 euros.

Una rambla muy ‘Irlandesa’

* La zona de La Rambla, en la que se sitúa el local, abunda en oferta parecida, como el O’Hara Centro o, el clásico The Auld Dublin