El Gobierno ha denegado el indulto al ex jefe superior de Policía del País Vasco Enrique Pamiès y el exinspector de Álava José María Ballesteros, los dos agentes condenados por dar el chivatazo a ETA en el bar Faisán de Irún en 2006, que desmontó una operación contra su aparato de extorsión.

Según han confirmado a Efe fuentes del Ministerio de Justicia, la decisión, que este viernes adelanta el periódico El Mundo, se adoptó hace tiempo en Consejo de Ministros y ya ha sido comunicada a la Audiencia Nacional, el tribunal sentenciador y encargado de comunicar a los condenados que el Ejecutivo no ve razones suficientes para otorgarles esta medida de gracia.

De esta forma, el Gobierno sigue el criterio de la sección tercera de la sala de lo Penal de la Audiencia Nacional y de la Fiscalía que se oponían a los indultos al entender que no hay motivos de equidad ni de utilidad pública para concederlos.

La sección tercera condenó a Pamiès y a Ballesteros el 16 de octubre de 2013 a sendas penas de un año y medio de cárcel y cuatro de inhabilitación por un delito de revelación de secretos por el chivatazo a ETA en el bar Faisán de Irún, penas que confirmó el Tribunal Supremo.

Sin embargo, la Audiencia Nacional decidió suspender en octubre de 2014 la ejecución de las penas en tanto no se resolviera el indulto solicitado, tal y como le pidió el Ministerio de Justicia.

Ahora la sala tercera tiene que ejecutar la sentencia que implica la expulsión del cuerpo de los condenados, si bien solo afectará a uno de ellos, el comisario Pamiès, ya que el inspector Ballesteros pasó a la situación de jubilación por incapacidad permanente hace unos años.