La cadena minorista Walmart continúa con su batalla contra el gigante de la venta online, Amazon, con una nueva estrategia para mejorar los servicios de entrega. La cadena estadounidense quiere convencer a sus trabajadores para que entreguen las compras online de sus clientes en su trayecto del trabajo a casa.

Esta idea, según han asegurado los ejecutivos de Walmart el pasado jueves, servirá para ahorrar costes en la entrega, la fase de la compra online que supone un mayor coste para la empresa. Una nueva estrategia que el responsable del comercio electrónico de la empresa, Marc Lore, ha definido como un "cambio de juego" en su batalla contra Amazon.

Walmart lleva tres meses probando este nuevo proceso de entrega en tres de sus tiendas (dos en Nueva Jersey y una en Arkansas), pero la compañía todavía no ha aclarado cuándo piensa implementar definitivamente este servicio en EE UU.

El portavoz de la compañía, Ravi Jariwala, ha asegurado que los trabajadores que realicen esta labor voluntaria, recibirán una paga extra. De momento, la compañía no ha aclarado si este sueldo extra se pagará en función de la distancia, del tiempo, del número de entregas o de una mezcla de todas las anteriores.

"Walmart tiene una cualificación única y una posición única para ser capaz de ofrecer este servicio", ha señalado Jariwala, que ha recordado que el 90% de los americanos vive en un radio de 15 kilómetros de un Walmart.