Agentes de la Guardia Civil detuvieron en el Ayuntamiento de Crecente (Pontevedra) a un hombre que, con una garrafa de gasolina, accedió a la Casa Consistorial y amenazó con quemarla, después de haber obligado a los funcionarios a abandonar las dependencias municipales.
El alcalde de la localidad, Julio César García-Luengo Pérez, explicó que el hombre, R.A.P., entró en el ayuntamiento en torno a las 9.00 horas y comenzó a rociar con gasolina las oficinas, en las que en ese momento se encontraban tres funcionarios, un vecino y el auxiliar de Policía Local.
Este último agente permaneció en el edificio y emprendió un diálogo con el hombre para intentar que depusiese su actitud, siendo capaz finalmente de reducirlo a la espera de que llegasen los efectivos de la Guardia Civil, que procedieron a su detención.
El regidor de Crecente indicó que el hombre, que es natural de Ourense y tiene vínculos familiares con el municipio pontevedrés, mantiene desde hace años un enfrentamiento con otro vecino en relación a la construcción de una casa.
Así, el alcalde interpretó que el detenido pretendía quemar la casa consistorial como represalia porque el Gobierno local no le solucionó la disputa urbanística con su vecino.
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