Los cero euros que destinará el Gobierno central a sufragar el transporte metropolitano en València y su área de influencia comprometen seriamente la viabilidad de la Autoridad de Transporte Metropolitano. Este organismo, creado a principios de este año por la Generalitat en la llamada ley de acompañamiento de los presupuestos, era una de las condiciones que exigía el Ejecutivo de Rajoy para subvencionar el transporte público tras la supresión de la anterior Agencia Valenciana de Movilidad por el Consell de Francisco Camps. Sin embargo, la situación se repite: Madrid recibirá 126 millones de euros, Barcelona 108 y Canarias 25 millones. València había solicitado 38 millones de euros, pero no recibirá ni un céntimo.

"Somos la única autoridad metropolitana sin recursos estatales", denuncian fuentes de la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, a la que está adscrita el nuevo ente. "Tenemos todo en marcha, ¿cuál es ahora la excusa para no conceder la subvención?", se preguntan. Desde el departamento que dirige María José Salvador confían en que pueda prosperar alguna enmienda y que se revierta esta solución, pues, de lo contrario, el funcionamiento de la Autoridad Metropolitana puede verse afectado.

Sin embargo, la Conselleria considera que ha hecho sus deberes en cuanto a la puesta en marcha de este organismo. De hecho, está ultimando el reglamento que establece los mecanismos para que la Autoridad asuma progresivamente sus competencias. De este modo, se está a la espera de los últimos informes presupuestarios para poder remitirlo al Consell Jurídic Consultiu y, una vez finalizados todos los trámites administrativos, sea aprobado por el pleno del Consell. Desde Obras Públicas apuntan a que en teoría el visto bueno del Gobierno valenciano se producirá antes del verano.

Entre sus funciones destaca la planificación de las infraestructuras para el transporte público de viajeros, así como de las redes y servicios de transporte, incluida la elaboración de los planes metropolitanos de movilidad sostenible de su ámbito territorial, además del seguimiento, control y evaluación de los mismos.

También se encargará de la suscripción y control de los contratos de servicios público de transporte de viajeros; la gestión administrativa de los servicios de transporte; el diseño y aprobación del régimen tarifario; la celebración de contratos-programa con los operadores de transporte y el control de su cumplimiento, y la colaboración y coordinación con las administraciones públicas en inversión en infraestructuras de transporte, ordenación del territorio y gestión de tráfico y de circulación.

Según ha constatado la Conselleria, la amplia oferta de transporte no se manifiesta de forma integrada, lo que provoca problemas de eficacia y eficiencia. El objetivo del nuevo ente es corregir estos problemas y contar con un sistema integral de transporte, al facilitar el intercambio modal y dar al ciudadano una visión global del sistema.

El área de València cuenta con 1,8 millones de habitantes repartidos en 60 municipios, donde cada día se producen 3,8 millones de viajes. Cada viajero dedica 28 minutos a cada viaje y en total son 175 millones de viajeros al año los que utilizan el transporte público. De ellos, 89 millones van en bus urbano, 60 millones el metro, 17 millones utilizan Cercanías de Renfe y 9 millones el bus interurbano. La red de bus interurbano es de 1.418 km, 871 km de EMT, 339 km de Cercanías y 146 km de FGV.