El cuadro, que retrata a un niño en un ambiente de gabinete de estudio, ha sido presentado por el jefe de la Obra Social de la Fundación Ibercaja, Juan Carlos Sánchez; la responsable del Programa de Educación y Cultura de la Obra Social de Ibercaja, Magdalena Lasala; la directora del Museo Goya, Rosario Añaños, y el secretario general técnico del Departamento de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón, Felipe Faci.

Se trata de un óleo sobre lienzo encargado por el infante Luis Antonio Jaime de Borbón a Goya en el año 1783. Se ha situado en la sala principal del Museo, junto al autoretrato de Goya, sumándose a los 14 lienzos y grabados que integran la colección permanente de la entidad y al retrato de 'Mariano de Goya', también cedido temporalmente en depósito, en 2016, por los herederos del Duque de Alburquerque.

El jefe de la Obra Social de Ibercaja, Juan Carlos Sánchez, ha incidido en que esta cesión temporal es fruto de las "buenísimas relaciones" que existen entre el Gobierno de Aragón y la Fundación de la entidad. Ha remarcado que estas dos instituciones tienen como objetivo "el progreso" de la región.

CONOCIMIENTO Y DIVULGACIÓN

Con su incorporación, el Museo Goya cumple con su vocación de ser un espacio vivo, consagrado a facilitar el conocimiento y divulgación de la obra del genio de Fuendetodos en y desde Aragón. El público zaragozano y visitantes pueden contemplar desde esta misma tarde este retrato, uno de los tres que hizo el pintor a Don Luis María.

La responsable del Programa de Educación y Cultura de la Obra Social de Ibercaja, Magdalena Lasala, ha explicado que es el primer retrato que Goya le hizo, datado en 1783, y es un óleo sobre lienzo de 134 por 113 centímetros, en el que puede leerse la inscripción: 'A S.S. Luis María, hixo del Ser. Infante D. Luis y la muy ilustre S.D. Mar Ter. Vallabriga, a los seis años y tres meses de edad', realizada sobre el mapa de la izquierda, encima de una silla.

FAMILIA REAL

La pintura representa al infante, situado en el centro de la escena, en un gabinete de estudio. Está de pie y con el cuerpo levemente girado hacia su derecha, mientras la cabeza mira de frente al espectador. Viste traje de corte, con camisa y medias blancas, chupa o chaleco, casaca y calzón de llamativo color azul Prusia, lo que revela su pertenencia a la familia real. Enriquece su vestimenta con puntillas de encaje en puños y pechera, un gran lazo que recoge su pelo a la altura de la nuca y hebillas en las abotonaduras del calzón y en los zapatos de tacón rojo que señalan discretamente su elevada alcurnia.

Lleva en la mano derecha una pieza de su puzzle geográfico y con la otra sostiene un compás. En un segundo plano se sitúan, a la derecha del espectador, un sillón sobre el que apoya un mapa de Europa en el soporte rígido con la inscripción citada; y al otro lado una mesa labrada y dorada sobre la que se disponen varios mapas en papel y el puzzle que se dispone a completar, todo ello sobre un fondo neutro.

Goya volvió a pintar a Don Luis María de Borbon y Vallabriga en otras dos ocasiones, de cuerpo entero y vestido de cardenal. Estas obras se encuentran en el Museo de Arte de Sao Paulo (Brasil) y en el Museo Nacional del Prado (Madrid). Con la exhibición de este lienzo el Museo refuerza su vocación de ahondar en el conocimiento y dimensión de la figura de Goya.

DESDE 2008, EN EL MUSEO DE ZARAGOZA

El retrato se exhibía desde abril de 2008 en el Museo de Zaragoza, después de haber sido sometido a un proceso de limpieza en el Museo del Prado, tras su ubicación en diferentes sedes, ha relatado Magdalena Lasala. La obra fue encargada por el infante Luis de Borbón en el año 1783 y permaneció en el Palacio de la Mosquera, en Arenas de San Pedro (Ávila), hasta su muerte en 1785, momento en el que fue trasladado al Palacio de Boadilla del Monte, en Madrid.

Tras el inventario de la testamentaría en 1797, el retrato pasó a la viuda del infante, María Teresa de Vallabriga, y estuvo en la residencia de la infanta, en la casa del Coso, desde 1797 hasta 1820. A su fallecimiento, el cuadro regresó a Boadilla, siguiendo su voluntad testamentaria y siguió transmitiéndose a su descendencia: María Teresa de Borbón y Vallabriga (1820-1828), Carlota Luisa de Godoy y Borbón (1828-1886), Alfonso Ruspoli y Godoy (1886-1914), y Carlos Luis Ruspoli (1914-1936) hasta la última propietaria, en el año 1943, María del Rosario Ignacia Álvarez de Toledo Ruspoli, que lo mantuvo, con paréntesis en Dublín (1947-1954), y en Berna (1954-1961), en su residencia de la calle Barquillo de Madrid hasta el año 2006.

CESIÓN TEMPORAL

La cesión temporal en depósito de esta pintura se realiza en virtud del acuerdo de colaboración firmado por la Consejería de Educación y Cultura, del Gobierno de Aragón y Obra Social de Ibercaja.

El retrato se sitúa en el museo junto a las obras del pintor propiedad de la Fundación Ibercaja y de la Real Sociedad Económica de Amigos del País, que se exponen reunidas desde 2008. En el año 2015 la colección completa del Museo se reordenó, para presentarla como Museo Goya, y en enero de 2016 se incorporó el retrato 'Mariano de Goya', también cedido temporalmente en depósito, por los herederos del Duque de Alburquerque.

La directora del Museo Goya, Rosario Añaños, ha apuntado que, en este tiempo, el espacio expositivo ha cubierto sus expectativas de ser la casa de Goya en Aragón y mostrar su figura y su obra en su contexto cultural y artístico, con sus precedentes y sus consecuencia creativas, y haciendo especial hincapié en los grandes artistas aragoneses contemporáneos, "que constantemente han vuelto al maestro para inspirarse".

Además, se ha convertido en una eficaz puerta a la obra de Goya en Aragón, ya que desde el Museo se cumple el compromiso de remitir la ruta goyesca, tan y como consta en el muro de acceso a la sala principal. Desde comienzos de 2017 ha sido visitado por más de 22.500 personas.

Por otro lado, se han organizado cinco exposiciones temporales en la Sala dedicada al fundador del Museo, José Camón Aznar, de manera que invitan a revisar periódicamente la casa de Goya en Aragón. Se trata de 'Goya y Zaragoza, sus raíces aragonesas', 'Goya y la Virgen, sus imágenes de Zaragoza', 'El tiempo también pinta. Carrera Blecua. Soñando Goya', 'Teresa de Jesús, desde Goya a los académicos de hoy', y ' Los caprichos de Goya de Dalí. Obra gráfica de Salvador Dalí', en exhibición hasta el 9 de julio.

La cesión presentada este jueves hace que se cumpla otro de los propósitos del Museo, que es mejorar la colección permanente en las fórmulas que pudieran plantearse.

COLABORACIÓN

El secretario general técnico del Departamento de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón, Felipe Faci, ha asegurado que "la colaboración público privada es fundamental en cultura", al tiempo que ha recordado que es "muy importante" para el Gobierno de Aragón la participación, la colaboración y este entendimiento con Ibercaja, que tiene su ejemplo "en la colocación de este cuadro".

Faci ha matizado que esta colaboración "no es un hecho puntual" ya que el Gobierno de Aragón e Ibercaja ya han preparado una exposición conjunta en Madrid el próximo diciembre: "Algo que no podía haber sido posible sin la colaboración la Obra Social de la entidad bancaria, que es fluida y de entendimiento mutuo porque coincidimos en los objetivos, como el de fomentar la cultura".