La consejera de Deporte, Mayte Pérez, ha presentado esta iniciativa experimental que da comienzo este mismo sábado con el inicio de la Copa Primavera de Baloncesto con la categoría alevín "A" femenina y masculina. El Departamento estudia ampliarlo a otras categorías y modalidades deportivas el próximo curso.

Pérez ha explicado que el Gobierno quiere "liderar un cambio paradigmático en la comprensión del fenómeno deportivo dentro de los juegos en edad escolar" y ha destacado que el trabajo se va a fijar ahora en "esa lenta pero profunda modificación del enfoque con el que se afronta el modelo deportivo".

"Queremos que el deporte aragonés y todo su soporte humano mejore sustancialmente y se convierta en una actividad motor de formación y educación en valores cívicos, fuente de bienestar personal y social, y contribuya a generar una sociedad equilibrada, justa, inclusiva y respetuosa con todos sus ciudadanos", ha asegurado.

Pérez ha insistido que este programa piloto pretende implicar a todos aquellos que rodean al deporte escolar en el desarrollo de la competición, de manera que el resultado deportivo no será el único factor a tener en cuenta.

"Los entrenadores, los jueces, los padres y familias formaran parte de la valoración deportiva final, que irá dirigida a comprender de qué manera se aplican los valores sociales de convivencia en las pistas deportivas. Los deportistas se convertirán en los verdaderos protagonistas del deporte", ha señalado.

10 PUNTOS PARTICIPATIVOS

Con este nuevo modelo de competición deportiva no solo se valora el resultado final o puntuación obtenida en el partido, sino que para poder ganar en la competición, y conseguir más puntos que los adversarios, será necesario demostrar unos valores deportivos y un juego limpio.

Para ello, y con el apoyo de Ibercaja, tradicional aliado del Gobierno de Aragón en la promoción del deporte en la edad escolar, se ha elaborado la aplicación informática 'Juega en valores' que permitirá que los agentes implicados en la competición puntúen a través del móvil.

Pueden participar en la votación de cada partido: los árbitros (dan 6 puntos), entrenadores (2 puntos), delegado de grada (1 punto), el público (1 puntos). La aplicación es de descarga gratuita.

En la competición se otorgan un máximo de 10 puntos que cada equipo puede ganar (para ver distribución de puntos por agentes participantes en la votación y parámetros a valorar, ver tabla anexa) y, de estos, solo 3 corresponden al marcador del partido y son otorgados por el árbitro.

BUENA ACOGIDA

El programa 'Juega en valores' ha sido muy gratamente recibido por la Federación Aragonesa de Baloncesto (FAB), así como los clubes y colegios adscritos a la misma. La FAB aceptó sin pensárselo el programa y ha puesto a disposición del Departamento todos sus medios para poder desarrollar el pilotaje.

Por su parte, la Federación Española de Baloncesto es conocedora del proyecto y también ha acogido el reto de promover un modelo de competición educativa con entusiasmo.

"Nosotros lo hemos comprobado: sin valores y sin ética en el deporte no se alcanza el éxito. En el baloncesto nos sentimos en la delantera de esta transmisión de valores", ha explicado el vicepresidente ejecutivo de la Federación Española de Baloncesto, José Antonio Montero, quien ha estado presente en la rueda de prensa de presentación de la iniciativa.

A lo largo de los próximos meses el Departamento de Educación, Cultura y Deporte tiene previsto reunirse con las Federaciones interesadas en el proyecto con el objetivo de ampliar el programa a nuevas modalidades deportivas.

Será durante el curso escolar 2017/2018 cuando se dé inicio al programa dentro de los Juegos Escolares. Este se aplicará en la categoría de iniciación benjamín de baloncesto en todos los equipos y podría extenderse a diferentes disciplinas deportivas.

Posteriormente se realizará una valoración final de su implantación y la posibilidad de ampliar a nuevas modalidades y/o categorías en años sucesivos. El Departamento de Educación, Cultura y Deporte tiene como objetivo que este nuevo modelo sirva para establecer un cambio significativo tanto en el planteamiento pedagógico del deporte y la competición como en el sistema de puntuación, donde la educación en valores toma un papel relevante.