El alargamiento voluntario de la vida laboral tras cumplir los 65 años permitirá mantener el actual sistema de pensiones español. Así lo considera el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, quien ayer anunció, en una conferencia de la ONU en León,

incentivos para los trabajadores que deseen retrasar su edad de jubilación, así como ayudas a las empresas para que esta ampliación de la vida laboral no les suponga ningún coste.

Las personas que quieran seguir trabajando, recibirán incentivos por ello. Así,

cada año que prolonguen la edad laboral tendrán un incremento en su jubilación del 3% anual, hasta alcanzar un máximo del 15% de mejora. "Ya hay personas que están esperando para poder acogerse a esta medida", aseguró Caldera.

Además,

la Seguridad Social se hará cargo de este coste, por lo que el gasto social para las empresas será cero.

El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, aseguró hoy en León, en su intervención ante el plenario de la Conferencia sobre Envejecimiento de la región europea de la ONU, que España apuesta por "la prolongación de la vida laboral voluntaria como medida que

favorece la sostenibilidad del sistema de protección social".

Caldera

afirmó que en un tiempo breve se aprobará la reforma legislativa del régimen de Seguridad Social, que permitirá seguir trabajando a aquellos que deseen alargar su vida laboral y estén en condiciones de ello.

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