Agentes de la Policía Nacional han detenido a cuatro traficantes que asaltaron a otros narcos para robarles estupefacientes mediante la técnica del 'vuelco'. Los hombres fueron sorprendidos de madrugada cuando sustraían 200 plantas de marihuana en una vivienda del núcleo urbano de Arroyo de la Miel, en el municipio malagueño de Benalmádena, y que previamente habían obligado a sus moradores a recolectar. A un quinto individuo se le arrestó por tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico.

La actuación policial, que se ha saldado con cinco detenciones en total por tráfico de estupefacientes, ha permitido el desmantelamiento de tres plantaciones de interior de 'cannabis sativa' instaladas en tres viviendas de un inmueble de Arroyo de la Miel; así como la intervención de un total de 800 plantas de marihuana en distintos estados de crecimiento, una pistola que resultó ser simulada, cuatro chalecos con anagramas policiales y dos placas emblemas, un puño americano, un espray autodefensa, una pata de cabra y una maza, guantes, pasamontañas y bridas.

El 'vuelco' es una técnica delictiva que consiste en robar a otros narcotraficantes la sustancia estupefaciente o bien el dinero procedente de este negocio, según han informado desde la Comisaría Provincial en un comunicado.

Los hechos que motivaron la actuación policial sucedieron el día 23 de abril. Poco después de la medianoche, la Sala del 091 recibió una llamada telefónica de la comisaría de Torremolinos-Benalmádena en la que un ciudadano alertaba de que varias personas intentaban secuestrar a un hombre en un inmueble de Arroyo de la Miel.

Inmediatamente se desplazaron al lugar varias dotaciones de la Policía Nacional. A su llegada, los agentes sorprendieron a tres individuos ataviados con guantes y chalecos policiales bajando por las escaleras del edificio y portando bolsas repletas de plantas de marihuana ya cortadas.

Tras estas primeras detenciones, los agentes localizaron en el interior de la vivienda a otro hombre con un chaleco con distintivos policiales que vigilaba a otras tres personas que se hallaban maniatadas. De inmediato, las victimas fueron liberadas y asistidas, ya que una de ellas presentaba varias lesiones en la cabeza y rostro.

Continuando con las pesquisas, los agentes averiguaron que los cuatro detenidos se presentaron en la vivienda en donde sabían de la existencia de cultivos de interior de marihuana. Tras identificarse como policías ante los inquilinos, accedieron a la vivienda donde había un invernadero con 200 plantas. Allí, les obligaron a cortar todas las matas y a meterlas en bolsas que seguidamente se llevaron. A continuación, maniataron a los moradores causándole lesiones en la cabeza y en el rostro a uno de ellos.

En el transcurso de la investigación se practicaron cinco registros en los que los agentes localizaron tres laboratorios de marihuana, uno que acababa de ser recolectado, en la planta primera del edificio; y otros dos, en la tercera. Los investigadores comprobaron que en las tres viviendas había instalados tres laboratorios acondicionados para el cultivo y recolección de cannabis sativa y que se surtían de la red eléctrica mediante un enganche ilegal.

Los agentes se incautaron de un total de 800 plantas de 'cannabis sativa' -200 ya cortadas y otras 600 distribuidas en dos invernaderos- así como un machete, un pulverizador de autodefensa, una pata de cabra y maza, un puño americano y una pistola simulada, entre otros efectos.

Los asaltantes fueron detenidos por su presunta participación en los delitos de tráfico de drogas, detención ilegal, robo con violencia y usurpación de funciones públicas. Además, una de las víctimas también fue detenida por tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico. La Autoridad Judicial ha dictado el ingreso en prisión para los cuatro investigados autores del 'vuelco'.