Un nuevo "panorama laboral" en donde la innovación, el conocimiento de las tecnologías y la reestructuración de las empresas son "más que evidentes" tras salir de una crisis económica y de un momento en nuestro país en el que "nuestros sistemas básicos eran, sobre todo, el de la construcción y el turismo". Ahora "todo ello está cambiando y nosotros tenemos que saber hacer frente a esos cambios".

El también profesor del máster universitario en Intervención Social en las Sociedades del Conocimiento de UNIR ha destacado en una entrevista concedida a Europa Press con motivo de la celebración del Día del Trabajo que la situación laboral en España "está mejorando considerablemente" pero ahora es el momento de ver "cómo acabamos de reconfigurar el sector laboral y cómo lo gestionamos".

ESPECIALIZACIÓN BASADA EN LO QUE MARCA EUROPA

En estos momentos "debemos ir hacia la especialización basada en lo que marca Europa y en el conocimiento de las tecnologías para ser expertos del mundo en estos campos y ofrecer los mejores servicios" porque ahora ya "no nos dirigimos tanto a fabricar productos sino a vender servicios".

Con todo ello, los españoles "también estamos en proceso de renovación". Contamos "con un gran número de licenciados y graduados que tienen un nivel muy alto, por ello, a nivel educativo tenemos gente capacitada y profesional para asumir el nuevo trabajo más especializado que viene ahora" pero el problema es que "con la crisis, las empresas han hecho más con menos trabajadores".

"Si hay que sacar algo positivo de la crisis es que ésta nos ha permitido mejorar en técnicas y procesos comunicativos y se ha innovado en los procesos pero hay que ver cómo, a partir de ahora, se recoloca a todos estos trabajadores en una nueva estructura laboral más especializada".

Un proceso evolutivo que va marcando su senda porque las empresas han variado, "se han ido adaptando a los cambios, y ahora es muy fácil oír hablar de motivación, de contar con trabajadores felices, inteligentes... la gestión de las emociones está llegando a las empresas con el fin de la mejora de la productividad y de la cultura empresarial".

"YA NO SE CASTIGA SINO QUE SE MOTIVA"

"Han cambiado las técnicas de liderazgo, ya no se castiga sino que se motiva, se buscan logros, se refuerzan confianzas y se fomentan los aspectos sociales como la participación, la aprobación o el afecto... todos estos cambios han llegado para quedarse con nosotros" porque hacia lo que aspiran las empresas es a contar "con un trabajador motivado, flexible, optimista y empático para mejorar su rendimiento".

Con respecto a la reducción de la jornada laboral, Renobell ha destacado que "nuestro país tiene una cultura diferente con el resto de Europa, pasamos muchas horas en el trabajo y hacemos lo mismo pero sería difícil recortar ese horario". En este sentido, ha destacado, "apuesto más por la flexibilidad horaria que por la reducción de jornada".

Flexibilidad a la que también se debe llegar en cuanto a la desconexión tecnológica tras terminar la jornada laboral. "Todo debe tener un uso adecuado". Quizás -ha reflexionado- "ésta no debe ser total pero sí moderada" porque en España "ya estamos cien por cien conectados con las redes sociales para nuestro ocio" aún así "lo ideal sería llegar a un acuerdo con la empresa, llegar a unos hábitos y generar esa confianza y flexibilidad".