La avería de un camión en la AP- 9, a la altura de O Burgo, puso ayer todavía más difícil a los residentes del área que trabajan en la ciudad la llegada puntual al trabajo.

A pesar de que no hubo heridos, las consecuencias de la avería, que se produjo hacia las 5 horas, llegaron a cientos de conductores (sólo por el peaje de A Barcala circulan diariamente más de quince mil usuarios). Además, las carreteras colindantes también quedaron colapsadas.

A partir de las 7.30 horas llegaron las cifras que pusieron a prueba la paciencia de los usuarios de la vía: una hora para recorrer cinco kilómetros, más de cuatro de retenciones...

Poco después de las nueve y media, una grúa especial se encargó de retirar el tráiler de la calzada, que en ese momento cumplía ya su quinta hora inutilizando un carril de la AP- 9. Hasta entonces, la avería había ocasionado que una carretera por la que circulan a menudo los más de 300.000 conductores del área de A Coruña se convirtiese un auténtico caos.

Mientras, la Guardia Civil apuntó ayer que, a pesar de las críticas de varios conductores por la falta de agentes en la zona, las patrullas regularon el tráfico como la situación exigía.

Piden cuentas a los políticos

La Liga Cívica Alas Coruña exigió ayer que los políticos ofrezcan las "explicaciones oportunas" por los colapsos en la entrada a la ciudad, y de la falta de previsión que se cometió ayer. En la misma línea se pronunció el teniente de alcalde, Henrique Tello, que criticó lo lenta que fue la evacuación.

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