Hay electrodomésticos que gastan menos y benefician al mismo tiempo a la economía familiar y al medio ambiente. Aunque la mejora ambiental, de momento, es menos perceptible para el ciudadano de a pie, el ahorro doméstico ya lo han notado las casi 55.000 familias que cambiaron sus neveras, lavadoras y lavavajillas antiguos por otros nuevos pero más eficientes (que consumen menos electricidad) con el primer plan renove de la Consejería de Innovación. Eso fue el año pasado.

A finales de este mes habrá una segunda oportunidad para que los andaluces renueven 60.000 aparatos. La Junta pone en marcha el segundo plan renove de electrodomésticos con un presupuesto de 5,5 millones.

Lo primero

Que los establecimientos que no participaron en el plan el año anterior se apunten. Tienen desde mañana hasta el 27 de noviembre para sumarse. Encontrarán la información en www.juntadendalucia.es/innovacioncienciayempresa o en el teléfono 902 113 000.

Los beneficiarios

Las familias residentes en Andalucía pueden cambiar un electrodoméstico de cada tipo por unidad familiar.

El ahorro inmediato

Si cambia la nevera o el lavavajillas por uno de clase A, A+ o A++, se ahorrará 85 euros.

Si lo que quiere cambiar es el frigorífico, restará del precio 70 euros, si es de tipo A; 95, si es de tipo A+, y 105 euros, si es A++.x

El proceso

Sólo hay que ir a una tienda autorizada (saldrá la lista también en la web de Innovación), comprar un electrodoméstico eficiente y se le aplicará el descuento directamente.

Las antiguas máquinas

Las tiendas se hacen cargo de retirarlas y llevarlas a puntos limpios para reciclar.

¿Qué es una máquina tipo A?

Para saber si se está comprando un electrodoméstico eficiente hay que mirar la etiqueta.

En España estos aparatos se clasifican por letras. Los que son de tipo A son los que menos gastan y los de tipo G, los que más. También están los A+ y A++, que resultan aún más eficientes. De hecho, por ejemplo, un frigorífico de clase A++ en 15 años gasta 296 euros en electricidad, frente a los 813 de gasto que supone uno tipo C y los 1.232 1 de uno tipo G.

Los beneficios

La nevera, la que más gasta

Supone un 15% de la factura eléctrica de una casa. Si es más eficiente gastaremos menos (ver ejemplo abajo).

Mejor el lavavajillas

Lavar a mano los platos con agua caliente puede salir un 60% más caro que con un friegaplatos clase A lleno.

En la lavadora también cuenta el agua

Con una lavadora clase A consumirá a lo largo de la vida de la máquina un 40% menos de energía, se ahorrará 200 euros en la factura y más de 35.000 litros de agua. Además, habrá librado a la atmósfera de media tonelada de dióxido de carbono (CO2).

En 2006

Las más de 61.000 máquinas que se cambiaron evitaron la emisión de más de 10.000 toneladas de CO2.