La portavoz del Govern y vicepresidenta del PDeCAT, Neus Munté, ha desdramatizado que pueda haber división de voto en el Parlament entre los socios de Junts pel Sí (PDeCAT y ERC) siempre que sea en "determinadas cuestiones" ajenas al proceso soberanista, en las que estas formaciones quieran marcar "perfil propio".

Munté ha dicho que no le consta que existan "órdenes" desde la dirección del PDeCAT para romper la disciplina de voto en JxSí, pero ha remarcado que "no es dramático" que esto pueda suceder en el futuro.

Su partido, ha dicho Munté, vive "con mucha normalidad" que en algunos aspectos, que no sean los propios del proceso soberanista, vote diferente de ERC.

"Es coherente, sano y necesario para todos que en otros aspectos -que no sean del proceso soberanista- podamos mostrar nuestras diferencias sin que sea algo negativo ni mucho menos dramático", ha expresado.

Munté ha subrayado que ERC y PDeCAT (antes CDC) tienen "diferencias notables" en el modelo de sociedad, por lo que es "normal e incluso necesario" que haya esa "clarificación" de posiciones en las votaciones del Parlament, aunque solo si es "en determinadas cuestiones".

En esta línea, la portavoz del Govern de JxSí ha remarcado que esta división en el grupo por el momento ha sido "anecdótica" y se ha producido "en un número muy pequeño de votaciones".

PDeCAT y ERC han votado por separado en alguna ocasión, la última el pasado pleno del Parlament, concretamente en un punto de una moción de la CUP que abogaba por la remunicipalización de servicios básicos y bienes comunes privatizados.

La vicepresidenta del PDeCAT, que siempre aparece en las quinielas como posible cartel electoral para suceder al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha considerado que su formación ya tiene "liderazgos" y no necesita nominar "candidatos" -que en todo caso se escogerían por primarias- cuando no están fijadas elecciones en el horizonte inmediato.

En este sentido, ha indicado que los nuevos calendarios electorales, con legislaturas más cortas, obliga a los partidos a actuar de forma distinta y a no mezclar liderazgos con candidatos a cada contienda electoral.

Ante el declive que apuntan las encuestas electorales para el PDeCAT, Munté ha admitido que queda trabajo por hacer en la definición y expansión del partido, que ha recordado que no tiene aún ni un año de vida, pues nació el pasado julio para tomar el relevo de la antigua Convergència Democràtica de Catalunya.