En concreto, la Dirección General del Medio Natural somete el Plan de Recuperación del Urogallo (Tetrao urogallus cantabricus) en Cantabria a información pública por un plazo de dos meses y dará audiencia a los interesados y representantes de los intereses sociales e institucionales afectados.

El urogallo es un ave con una amplia área de distribución en la región Paleártica que se

extiende desde Noruega, su límite septentrional, a Grecia, el meridional, y desde la República Popular de China en su extremo oriental, a la Península Ibérica el occidental.

Hasta la fecha no se han realizado estimaciones de la tendencia poblacional de la especie a nivel global, pero según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) se ha evaluado como de menor interés, estando algunas de las poblaciones de los bordes de su área de distribución seriamente amenazadas.

En la Península Ibérica existen dos poblaciones de urogallo inconexas entre sí. La de los

Pirineos, en un estado de conservación más favorable, que se corresponde con la subespecie

Tetrao urogallus aquitanicus, y la de la Cordillera Cantábrica, el Tetrao urogallus

cantabricus, con grave riesgo de desaparecer.

En Cantabria, al igual que en el resto de la Cordillera, se ha producido una fuerte regresión de la especie desde 1982 hasta nuestros días, pasando de los 13-21 machos en cinco

áreas de canto en la década de los años ochenta a unos pocos ejemplares en la actualidad.

Así, la población de urogallo ha ido desapareciendo en Cantabria de este a oeste, quedado recluida prácticamente al entorno del Parque Nacional de los Picos de Europa.

Todo ello ha llevado a la inclusión del urogallo cantábrico en la categoría de en peligro de extinción con la máxima protección según el Catálogo Español de Especies Amenazadas. Además el urogallo se encuentra incluido en la Directiva comunitaria relativa a la conservación de las aves silvestres.

El régimen jurídico de la especie en la región se basa en la Ley de Cantabria de Conservación de la Naturaleza y el Decreto por el que se regula el Catálogo Regional de Especies Amenazadas de Cantabria, en donde fue incluida en la categoría 'En peligro de extinción'. En la normativa, se recogen los planes de recuperación como instrumentos legales para la conservación de las poblaciones en peligro de extinción, cuya elaboración corresponde a las comunidades autónomas.

El plan que ahora se somete a información pública viene a sustituir al aprobado mediante el Decreto 52/2014, de 18 de septiembre, por el que se aprobó el Plan de recuperación del urogallo cantábrico, que fue anulado por el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria en 2015 por existir defectos de forma en su tramitación.