La Comisión Suprema para las Negociaciones (CSN), principal alianza opositora siria, acudirá a la próxima ronda de conversaciones en Ginebra, cuyo inicio está previsto para el jueves, según uno de sus portavoces, Riad Agha. "Esta ronda el diálogo se centrará en la transición política en Siria", dijo.

Agregó que este asunto está relacionado con otros de los temas de la agenda de conversaciones, la redacción de una declaración constitucional, que siente las bases para redactar una nueva Carta Magna en el país árabe.

Agha confirmó que existe una "propuesta" de Rusia sobre la futura Constitución. "Es una iniciativa más y todavía no la hemos estudiado, pero no puede ser que un país imponga su idea de Constitución para Siria, tiene que ser consensuada entre los sirios", indicó.

En una entrevista con medios rusos, el presidente sirio, Bachar al Asad, expresó el domingo su apoyo al proyecto ruso para la futura Carta Magna.

El borrador propuesto por el Kremlin blinda la integridad territorial de Siria y establece la supremacía del derecho internacional, entre otros aspectos, pero también abre la puerta para que Al Asad pueda ser designado de nuevo como presidente en las dos próximas elecciones.

Rusia es uno de los principales aliados del Gobierno de Damasco y apoya militarmente las operaciones del Ejército sirio.

La última ronda de conversaciones indirectas en Ginebra, auspiciadas por la ONU, se celebró entre finales de febrero y comienzos de marzo y concluyó con una agenda consensuada por la delegación gubernamental y la opositora para tratar de alcanzar una solución negociada al conflicto.

La ONU insiste en que las negociaciones deben abordar los tres elementos definidos en la resolución 2254 del Consejo de Seguridad, que prevé la creación de un Gobierno de transición, la redacción de una nueva Constitución y la celebración de elecciones libres y justas supervisadas por el organismo internacional. A petición del Gobierno sirio, se añadirá un cuarto paquete sobre temas relacionados con la estrategia antiterrorista.

Por otra parte, facciones islámicas sirias, entre las que figura la exfilial de Al Qaeda, han renovado su ataque contra zonas del extrarradio nororiental de Damasco, donde se han intensificado los choques contra los efectivos gubernamentales.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó de que los enfrentamientos se reanudaron al amanecer en una área de fábricas y en el edificio de la electricidad en el barrio de Yobar y sus alrededores.

En los combates participan algunos de los principales grupos armados islámicos, como el Organismo de Liberación del Levante (exfilial de Al Qaeda), el Ejército del Islam, el Movimiento Islámico de los Libres de Sham y la Legión de la Misercordia.

La ONG destacó que aviones de guerra no identificados tuvieron como blanco la zona de los enfrentamientos, donde hay también fuego cruzado de artillería.

Al menos 25 personas han resultado heridas por el impacto de cohetes en barrios del centro de Damasco, como Bab Tuma, Bab Sharqui, Al Tiyara, Al Abasiyín y el área entre Bab al Musala y Al Shagur, así como en distritos periféricos, como Masaken Barze y Yaramana, indicó el Observatorio.

Por su parte, la agencia de noticias oficial siria, SANA, señaló que unidades castrenses frustraron un intento de "ataque terrorista" por parte del Frente al Nusra, como se llamaba la exfilial de Al Qaeda hasta julio pasado, y de otros grupos "takfiríes" (extremistas islámicos).