Agresiones, intentos de atropello y amenazas con navaja en mano. No es el día a día de un policía del Bronx, sino algunos de los peligros a los que tienen que hacer frente los 800 agentes de Movilidad que se encargan de regular y ordenar el tráfico de la capital.

Desde que nació esta figura, hace ahora tres años, el Sindicato de Agentes de Movilidad (Spam) lleva contabilizadas cuatro agresiones físicas y quince intentos. El caso más reciente ocurrió el viernes: un conductor intentó arrollar a un agente en Bravo Murillo.Y hace pocos días, el 17 de octubre, otro fue apaleado por unos jóvenes cerca del instituto San Isidro de la calle Toledo: grabaron el ataque y lo colgaron en YouTube.

Concentración

Por eso más de un centenar de estos trabajadores, apoyados por algunos policías municipales, se han manifestado enfrente de la Junta Municipal de Moncloa para exigir el fin de las patrullas individuales. "Estas patrullas dejan al agente indefenso, porque a veces han de poner multas a gente violenta, solo y sin armas para defenderte", denuncia el Spam. El Ayuntamiento de Madrid afirma que "sólo el 10% de estos agentes patrullan solos, y pueden pedir ayuda con la emisora".

Pablo, 30 años. Agente de Movilidad. "Más de una vez han intentado atropellarme". Pablo lleva tres años operando en la zona centro. "Voy solo y sin ningún tipo de arma. Si al menos fuera con un compañero, en caso de agresión no sería el único testigo".

César Jiménez, 45 años. Polícía local. "Nuestros compañeros están desamparados". César trabaja como policía y se solidariza con sus compañeros de Movilidad: "Tienen que plantar cara a personas violentas y armadas solos e indefensos".

María Jesús Valentín, 24 años. Agente de Movilidad. "No tenemos nada de autoridad". María Jesús también recuerda que a veces, a la hora de llamar a un compañero para pedir ayuda, "las emisoras no tienen cobertura y dejan de funciona".