El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife anunció este jueves una línea de ayudas sociales dirigida a personas que acrediten escasez de recursos que permitirá sufragar los gastos que ocasiona el pago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) que grava la titularidad de vivienda habitual.

La presentación corrió a cargo del alcalde, José Manuel Bermúdez, el concejal de Hacienda y Recursos Humanos, Juan José Martínez, y la concejal de Vivienda, Carmen Delia Alberto.

Bermúdez destacó que Santa Cruz de Tenerife es de las pocas ciudades de España que cuenta con una prestación de estas características, y manifestó que con esta nueva línea de ayudas se quiere "complementar" el amplio catálogo de ayudas sociales que gestiona el Ayuntamiento, "que alivian la situación de vecinos sin recursos y les permiten afrontar determinados pagos".

Juan José Martínez, por su parte, destacó que el área de Hacienda "dirige esta medida a aquellos ciudadanos en situación de exclusión social beneficiarios de ayudas municipales y propietarios de un único inmueble que es su residencia habitual".

Se trata de perceptores de prestaciones económicas de asistencia social (PEAS), cuya vivienda tenga valor catastral inferior a 50.000 euros.

La iniciativa se tramitará a través de Viviendas Municipales, cuya edil, Carmen Delia Alberto, señaló que "se informará en fechas próximas sobre las características de la convocatoria, plazos y trámites a aportar, si bien se pretende que sea una tramitación simplificada que requiera únicamente los datos que ya obren en poder del Instituto Municipal de Atención Social (IMAS) como perceptor de ayudas, y que acredite que se trata de la única propiedad del destinatario".

Desde el Ayuntamiento se estima que unas 1.100 personas son potenciales beneficiarios de esta medida, todos perceptores de PEAS y que en la actualidad son titulares de recibos de IBI en Santa Cruz.

La partida consignada en los presupuestos asciende a 200.000 euros, y se pretende que la convocatoria recoja un procedimiento que evite el desembolso de la ayuda, que se compensará directamente.

Esta nueva línea de ayudas viene a completar el amplio catálogo de prestaciones sociales que gestiona el consistorio santacrucero.

En 2016 se pagó un total de 22.637 PEAS que sumaron 4.838.051,81 euros, de las cuales el importe más destacado es el referido a mantenimiento de la vivienda habitual.

Hasta 2.292 familias recibieron una prestación de estas características el pasado ejercicio, por 2.179.084,13 euros. El importante incremento de los fondos desde el año 2011 ha ido en paralelo a la mejor y más rápida gestión de los mismos.

REFORMA FISCAL

El Pleno del Ayuntamiento debatirá esta semana, precisamente, sobre los proyectos de modificación de las ordenanzas fiscales reguladoras de dos impuestos municipales, dentro del proceso de reforma tributaria que se acometerá a lo largo de este ejercicio, encaminada a reducir la presión fiscal en la capital tinerfeña.

Se trata de la ordenanza fiscal reguladora del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), y del Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana.

La previsible aprobación de estas normas supondrá una rebaja tributaria que conlleva, según el cálculo de la concejalía de Hacienda, un ahorro de un millón de euros anual para los ciudadanos.

Con esta medida, el Impuesto sobre el Incremento de los Valores de los Terrenos de Naturaleza Urbana, mucho más conocido como plusvalía, ve incrementada la bonificación actual del 25 al 50%. Serán beneficiarios de esta medida los descendientes (incluidos los adoptados) y cónyuges, así como los ascendientes y adoptantes, y la bonificación fiscal se estima en 653.000 euros.

Por otro lado, la instalación de paneles solares tendrá un impacto positivo en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles. Así, se aumenta la bonificación actual de la que disfruta, pasando del 25 al 40%, por un periodo de 6 años de duración. La estimación de menor recaudación se compensará con el incremento experimentado por la revisión catastral.

El Ayuntamiento sigue cumpliendo el compromiso asumido de congelar o rebajar los tributos municipales por tercer año consecutivo, como medida de fomento del empleo y la actividad económica, pero también de ahorro para las familias.

Estas acciones se adoptan debido a que las cuentas municipales se encuentran saneadas tras cuatro años de buena gestión, que ha llevado incluso a incrementar el presupuesto de forma sostenida a lo largo de los últimos cuatro años, resaltan desde el consistorio.

Santa Cruz de Tenerife no solo cumple con todos los criterios de estabilidad presupuestaria, sino que ha mejorado notablemente la recaudación, puesto que son más personas las que cumplen con sus obligaciones tributarias, y el sistema de inspección también es más eficiente.