Meninas para ver y tocar transportan a la Alameda de los peatones al s. xvii, la época de mayor esplendor de este gran espacio de la ciudad.
El bulevar, a punto de concluir las obras que le devolverán el aspecto de sus orígenes –un gran paseo arbolado con fuentes–, ha sido el lugar elegido para exponer las esculturas vanguardistas de Manolo Valdés, un artista valenciano de reconocido prestigio internacional.
Hasta el 20 de enero la Alameda será un museo al aire libre donde sevillanos y turistas podrán disfrutar de la dama de Elche, la reina Mariana, la gran Odalisca de Ingres o las Meninas de Velázquez. En total, 17 esculturas en tres dimensiones que conjugan lo clásico con lo moderno. A ras de suelo, alejadas de pedestales, permiten al público poderlas tocar.
La muestra supone el pistoletazo de salida de la nueva Alameda de Hércules, que estará totalmente terminada para Navidad y que desde hace unos meses se ha convertido en uno de los principales focos de ocio con la apertura de nuevos restaurantes. Y de botellón, según denuncian los vecinos.
Últimos retoques
Las obras de peatonalización de este gran espacio se encuentran al 80%. Las vallas que durante más de un año han prohibido el acceso a gran parte de la plaza ya casi han desaparecido.
Los mosaicos de los que brotarán chorros de agua para convertirse en fuentes están colocados. Ahora, los trabajos se centran en los últimos retoques, como la construcción de las pérgolas que, junto a los grandes árboles, darán sombra a este espacio de más de 20.000 m2.
Reunión con hosteleros
Los dos grupos políticos del Gobierno municipal, IU y PSOE, se reunirán en los próximos días con los hosteleros de la Alameda para definir la nueva ubicación de los veladores.
Los hosteleros aseguran que en ningún caso invadirán con mesas y sillas todo el espacio público. De hecho, no se incrementará el número actual: unas 1.500 sillas. Crearán pasillos peatonales entre las fachadas y los veladores para no obstaculizar el paso.
La exposición y la alameda
María Morera, vecina. 75 años
«La exposición me parece muy bonita y la Alameda está quedando muy bien. Pero el suelo es muy poroso y coge mucha suciedad. Lo que no me gusta nada es el botellón que se monta por la noche, queremos descansar».
AC Javier Cornejo, estudiante. 24 años.
«Me gustan todas las actividades que sean al aire libre, así que la exposición me parece genial. Pero creo que ha tenido poca publicidad. Yo la he visto de casualidad porque pasaba por aquí, no tenía ni idea».
Mar Fernández, estudiante. 19 años
«Es novedoso, se hacen pocas cosas de este tipo. Me gusta que haya eventos culturales.
En cuanto a la Alameda, no comparto el color del suelo. No han terminado las obras y ya está hecho una porquería».
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