Woody Allen sigue con su costumbre de estrenar una película al año. Tras la comedia sobrenatural Scoop, el director neoyorquino regresa al drama –con un toque de thriller–, como ya hizo en Match Point.
En Cassandra’s Dream, Allen narra la historia de dos hermanos que aspiran a una vida mejor. Uno de ellos tiene problemas con el juego, y el otro quiere dejar el restaurante de su padre para invertir en otro negocio hostelero. La oportunidad de solucionar sus problemas se les presenta con la llegada de su tío millonario.
El problema viene cuando su querido familiar los incita a que cometan un crimen como moneda de cambio por su ayuda. Como en Match Point, las ambiciones de los protagonistas entrarán en conflicto con su ética.
Los nuevos chicos Allen
Para casi todos los actores es un placer intervenir en una cinta de Woody Allen. En esta ocasión, la suerte ha recaído en el escocés Ewan McGregor (La isla) y el irlandés Colin Farrell (El nuevo mundo); completa el reparto el veterano Tom Wilkinson (Full Monty).
Por tercera vez, Allen vuelve a tomar Londres como escenario principal de la película. Lejos queda su Nueva York natal como fuente de inspiración. Su próxima parada: Barcelona.
El lado serio de Allen
El cine de Woody Allen ha combinado su lado más cómico con una serie de cintas en las que ha explorado el drama. En ellas se observa una gran influencia de uno de sus maestros, Ingmar Bergman, como dejó claro en Interiores (1978). Dramáticas son también Delitos y faltas, Maridos y mujeres,
o una de sus últimas películas, Match Point.
* Reino Unido, 2007. Dir.: Woody Allen. Int.: Ewan McGregor, Colin Farrell, Tom Wilkinson. Dur.: 108 min.
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