Los hechos se remontan a enero, cuando la propietaria de una explotación agrícola de Maguilla presentó una denuncia ante la Guardia Civil sobre la sustracción de 10.000 kilogramos de aceitunas del interior de la citada explotación, valorado en unos 6.500 euros.

Tras esta denuncia, los agentes realizaron una "inspección ocular" e la citada explotación, y con los datos obtenidos durante su desarrollo, permitió al Equipo ROCA de la Guardia Civil de Llerena "determinar la hipótesis de la posible existencia de una simulación de delito".

Ante ello, estudios y pruebas obtenidas, se tomo manifestación en calidad de investigada a la propietaria de la explotación, por un supuesto delito contra la administración de justicia, simular un delito y presentar una denuncia falsa.

Y es que, según señala la Guardia Civil, los agentes constataron que días posteriores a la presentación de la denuncia, encargados de las explotaciones agrícolas de la investigada, entregaron en puntos de recepción de aceitunas ubicados en Azuaga y Berlanga, más de 10.000 kilos de aceitunas supuestamente recolectadas de otras explotaciones propiedad de la denunciante.

Por este motivo, con el desarrollo de la investigación y estudio realizado, "los agentes creen que la motivación de la denuncia presentada era el aumentar los datos de producción", señala.

Las diligencias han sido puestas a disposición de los Juzgados de Instrucción de Llerena (Badajoz).