A partir del próximo mes de marzo, un vehículo específico de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) vigilará y sancionará a los coches privados que circulen o estacionen por el carril bus de Barcelona. Las sanciones no serán nuevas sino que ya se aplican, lo novedoso es la puesta en marcha de este vehículo especial 100% eléctrico con actividad sancionadora.

En el último año, se han contabilizado más de 6.000 infracciones en los carriles de bus y taxi de la capital catalana, una cifra que se quiere invertir.

La medida la ha confirmado este miércoles en rueda de prensa la regidora de Mobilitat del Ajuntament y presidenta de TMB, Mercedes Vidal, que ha presentado el resto de actuaciones dentro del Pla de Mobilitat Urbana (PMU) 2013-18 que el consistorio aplicará en tres fases durante los dos próximos años para incrementar la cifra de carriles bus de la ciudad y la velocidad y frecuencia de la red de autobuses.

Vidal justificaba la puesta en marcha del plan de movilidad, afirmando que "la Guàrdia Urbana ya actúa pero vemos que no es suficiente porque la invasión del vehículo privado es constante en los carriles para bus y taxi. Necesitamos por ello un aumento de la vigilancia y una priorización semafórica para poder tener un mejor funcionamiento del transporte público en términos de frecuencia, velocidad y regularidad".

Actualmente, las 1.060 unidades de autobuses urbanos existentes circulan a una velocidad media de 12,08 kilómetros por hora (Vidal ha remarcado que en otras ciudades europeas la velocidad alcanza los 14 km/h) y los 10.523 taxis con licencia lo hacen a una media de 18,45 kilómetros hora.

De los 873 kilómetros del recorrido de los autobuses por la ciudad, solo 163 cuentan con carril bus. Con el despliegue de la V fase de la Nova Xarxa de Bus, el Ajuntament busca incrementar estos carriles.

La primera fase se pone en marcha de forma inmediata y hasta julio, con una campaña de la Guàrdia Urbana para luchar contra el mal uso de los carriles bus y taxi que arrancó el pasado lunes. En julio se instalará un sistema automático de contro de infracciones mediante una cámara de visión artificial en el carril de bus taxi de Vall d'Hebron entre avenida Vallcarca y la plaza Alfonso Comín, sentido Llobregat.

Ese mismo mes también se abrirán nuevos tramos de carril bus taxi en la calle València entre Navas y Espronceda, en Via Favència entre la calle Artesania y la plaza Karl Marx, sentido Llobregat, y en la Gran Via entre la calle Josep Pla y la Rambla Prim, sentido Besòs.

Durante el segundo semestre de este año se pondrá en marcha la segunda fase del plan, compuesta de mejoras en la terminal de autobuses de la calle Tarragona con plaza Espanya para facilitar la incorporación de los vehículos a la plaza; medidas de priorización del tráfico de autobuses en el lateral mar de la Gran Via entre la plaza Cerdà y la calle Química, combinando un nuevo carril bus y las frecuencias semafóricas para agilizar la maniobra de paso de los autobuses de la calzada lateral a la central y otras mejoras para el transporte público en el carril multiuso de la ronda General Mitre para que los autobuses puedan eludir los retrasos producidos por la congestión de tráfico en la zona en hora punta.

La tercera fase se llevará a cabo cuando se implante la nueva red de bus, e incorporará cambios viales en la plaza de Sants para facilitar el movimiento de los autobuses, la mejora de las líneas en la Zona Universitària y diversos ajustes para beneficiar a los buses que circulan por la avenida Mare de Déu de Montserrat.