Con las acciones preventivas, inspecciones e investigación llevada a cabo en la presente campaña de aceitunas, el Equipo ROCA de la Guardia Civil de Llerena detectó cómo en un establecimiento de recepción de este fruto ubicado en el municipio de Villalba de los Barros se estaban llevando a cabo entregas ilícitas de mercancías.

Dispositivos de servicios y vigilancia que dieron sus frutos, cuando este pasado 20 de enero, los agentes observaron en el citado punto, como los ocupantes de un vehículo, personas con numerosos antecedentes de hurto de aceitunas, descargaban el fruto que portaban.

La actuación ha sido ejecutada en el marco de la operación "PICO LIMON" desarrollada dentro del Plan de lucha contra las sustracciones en las explotaciones agrícolas.

Una vez finalizada la descarga, antes de salir del establecimiento, se procedió a la identificación e inspección de la trazabilidad del fruto que acababan de descargar, quienes con evidentes síntomas de nerviosismo, confirieron un documento que les entregó el dueño del establecimiento, según manifestación de los mismos, todo ello para que en al día siguiente puedan transportar aceitunas y "no" se las interviniese la Guardia Civil.

A requerimiento del Equipo ROCA, para el cotejo y verificación, el titular del establecimiento entregó un documento de trazabilidad y la documentación de la que acababan de descargar, en la cual se puede observar que los datos que figuran "no se corresponde con la realidad", explica en nota de prensa la Guardia Civil.

Tras la información y verificación por las inspecciones oculares

llevadas a cabo en los lugares donde se llevaron a cabo hurtos de aceitunas, se pudo averiguar que los 800 kilogramos que descargaron los dos identificados, vecinos de Almendralejo, fueron presuntamente sustraídas de una explotación agrícola de Berlanga, por lo que les instruyó diligencias como investigados.

Posteriormente y tras el "laborioso" análisis de toda la documentación del punto de compraventa, con más de 500 entradas, se desprende que el titular presuntamente pudo recepcionar ilícitamente en el citado establecimiento más de 81.000 kilogramos de aceituna a lo largo de la presente campaña, con un valor aproximado de 40.500 euros.

MODUS OPERANDI

Supuestamente el titular del punto de compraventa procedía a recibir mercancía sin ninguna acreditación de procedencia o con documentación "falsa" extendida por él, todo ello "para salvar el control o la inspección que lleva a cabo la Guardia Civil durante el transporte y entrega de la aceituna".

Esta documentación la entregaba a clientes seleccionados, en las que hacía constar en el apartado de propietario/a una finca que tenia presuntamente alquilada a nombre de su empresa, finca en la que "no" quedaba aceituna.

También les cumplimentaba los datos con el nombre de su empresa, en los apartados de establecimientos y pesaje, acción con las que "se aseguraba que toda la aceituna que recolectasen, en cualquier finca, tuviera que ser trasladada y descargada en su empresa", explica la Guardia Civil.

Finalmente, las diligencias junto con el detenido y las dos personas investigadas, son puestas a disposición del Juzgado de Instrucción Llerena.