Bolivia no respira

El presidente de Bolivia, Carlos Mesa, se vio obligado ayer a abandonar el Palacio de Gobierno debido a la amenaza que representaba la multitudinaria manifestación que recorrió La Paz (foto), que derivó en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad.
Antes, el opositor Movimiento Al Socialismo (MAS) había pedido su renuncia para que se adelanten las elecciones. Mientras sigue la búsqueda de una salida política a la crisis, desatada por la exigencia de que se nacionalicen los hidrocarburos, el país está aislado del exterior por barricadas en las carreteras.
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