Cuando los visitantes pasean por la ciudad francesa de Aurvers-sur-Oise es posible que acaben dando con la tumba del artista Vicent van Gogh. El pintor holandés pasó sus últimos días en este pueblo al noroeste de París antes de que disparase a sí mismo y muriese a la edad de 37 años.

Van Gogh yace junto a su hermano Theo, y las autoridades han decidido restaurar ambas tumbas ya que se encuentran en un mal estado de conservación. Por ello, han lanzado una campaña para recaudar un millón de euros con lo que esperan tanto reparar las lápidas como otros lugares de la ciudad francesa, como por ejemplo la iglesia de la localidad que inspiró al pintor en uno de sus lienzos de 1980 pero que fue dañada por unas fuertes lluvias en 2015.

La campaña se ha hecho eco en las redes sociales y ha llegado al gobierno estatal que ha aportado 600.000 euros. El resto del dinero se prevé que lleguen gracias al método de crowfunding internacional que ha lanzado el Instituto van Gogh.