Así lo ha informado el colectivo en un comunicado, en el que ha señalado que, aunque el presupuesto de la Consejería de Medio Rural ha aumentado en 2017 en 12 millones de euros, la distribución de la cantidad "no se ha centrado en partidas deficitarias y de gran importancia para el sector" como, a su juicio, son las citadas.

Por ello, ASAJA ha registrado esta propuesta que pretende convertir en Proposición No de Ley para la "salvaguarda del sector ganadero regional". En concreto, reclama duplicar los importes de sanidad y de planes de mejora.

En su nota de prensa, la agrupación argumenta que el "descenso continuado" del presupuesto de la Consejería de Medio Rural unido a años de crisis ha desencadenado el cierre de explotaciones, la subsistencia de otras y la falta de políticas para que nuevas se incorporen. A lo que se suma el retraso de los pagos y normativas que "ahogan al sector", ha denunciado.

Esta "situación límite" condujo a ASAJA Cantabria a organizar distintas concentraciones en 2016 para exigir un presupuesto "digno" que atienda a los problemas del sector, "y así se hizo, el presupuesto de la Consejería de Medio Rural aumentó en 12 millones, pero la distribución de esta cantidad no se centró en partidas deficitarias de importancia colosal para que exista un futuro real en este sector", ha lamentado.

Por ello, se ha registrado una propuesta para incrementar el presupuesto en sanidad animal. La situación de excepcionalidad creada por la aparición de un foco de brucelosis y el aumento de la prevalencia en tuberculosis bovina conllevará a un gasto mayor en ayudas a la repoblación, ayudas por periodos de cuarentena y ayudas por animales sacrificados en las campañas de saneamiento.

Además, también se establece el desarrollo de estudios y otras iniciativas. Con la actual situación es imposible afrontarla con el presupuesto asignado, ha sostenido, subrayando que la sanidad animal es fundamental para tener viabilidad económica en una explotación y puede llevar a la misma al cierre sin una adecuada gestión después de un vaciado sanitario o continuos sacrificios. Por ello, es indispensable centrarse en un problema que afecta a la totalidad del ganado.

Su segunda demanda es incrementar el presupuesto para planes de mejora y primeras incorporaciones. Cada año 200 ganaderos solicitantes son denegados por falta de dotación presupuestaria, lo que convierte esta partida en "estratégica" porque dinamiza el tejido social y económico de las zonas rurales, al favorecerse la inversión, la contratación y la sostenibilidad medioambiental.

Así, Asaja solicita que se duplique esta partida para que los núcleos rurales no sigan perdiendo activos y se genere empleo.

Finalmente, la asociación reclama el pago del 100% de la deuda contraída con la Prima Nacional Complementaria de Vaca Nodriza de los años 2009 y 2010 que el Parlamento se comprometió a abonar a los ganaderos en el primer trimestre de 2017. ASAJA considera "inadmisible" que tras adquirir el compromiso de pago el 16 de mayo de 2016 y siete años después de la deuda, se resuelva pagar la cantidad en dos años, sin haber habido ningún consenso en cuanto a esta decisión.