Según los pronósticos de la Agencia Vasca de Meteorología, Euskalmet, un frente cálido que se mantendrá estacionario durante la jornada de hoy y durante la primera mitad de mañana lunes dejará abundantes precipitaciones persistentes en las próximas horas.

Los acumulados más importantes se registrarán en puntos del interior del este de Gipuzkoa, donde se podrían llegar a acumular más de 80 l/m2 en 24 horas y más de 60 en el resto de la vertiente cantábrica, lo que unido a la saturación del suelo y el deshielo en zonas altas, hacen que se active el nivel naranja con especial atención a las cuencas del Urumea, Oria y Deba.

En vista de la situación, los servicios de emergencia están alertados y realizando seguimiento de las previsiones y de la evolución del episodio.

A partir del martes las precipitaciones serán débiles y ocasionales y si bien la cota de nieve se situará por encima de los 1.000 metros, a partir de esa misma jornada la cota de nieve se situará a nivel del mar.

Al mismo tiempo, el viento soplará del noroeste, a ratos intensos, sobre todo en zonas de montaña y litoral, y especialmente hoy al final del día y mañana por la mañana, cuando las rachas máximas podrían situarse entre los 80-100 km/h en zonas expuestas y los 60-80 km/h en zonas no expuestas.

A partir del lunes, ya por la tarde, el viento irá perdiendo intensidad y las precipitaciones ya no serán tan abundantes. El viento irá girando a norte-nordeste e irá perdiendo intensidad, por lo que las precipitaciones irán siendo cada vez más frecuentes en el oeste, remitiendo definitivamente durante la noche de mañana.

AIRE FRÍO Y HELADAS

A partir del martes afectará a Euskadi una masa de aire continental, más fría que la de este fin de semana, lo que dejaría días de intenso frío, con máximas que apenas superarían los 0 grados y mínimas de -5 ºC y aún por debajo.

Aunque en principio la masa de aire es seca, podría tener cierto recorrido por el mar, dejando algunas precipitaciones, que aunque por ahora no parece que fueran relevantes, podrían ser en forma de nieve a nivel del mar. Esta situación se puede prolongar durante 2-3 días y a partir de ahí la tendencia sería a ir recuperándose las temperaturas, pero muy lentamente.