Hasta estos dos puntos se han trasladado el alcalde Juan Manuel Valle, y el delegado de Agricultura, Jesús Condán. Así, el alcalde ha explicado que en esta fase el Ayuntamiento palaciego ha destinado una cantidad cercana a los 90.000 euros, dentro de la ejecución de uno los proyectos del Plan Supera IV, por el que recibe fondos de la Diputación de Sevilla.

Concretamente, el Camino de Alcalá supone un kilómetro de los cinco que se están arreglando con cargo al Supera. "Estamos actuando de manera integral, con relleno de áridos y chinos y adecuación de desagües", añade. También ha recalcado que "ya se arregló de igual manera el Camino de la Capitana".

Según expresa el regidor, "es un compromiso del equipo de gobierno ir destinando cada año una considerable cuantía dentro de los presupuestos municipales para el arreglo de caminos rurales y que nuestros agricultores puedan hacer uso de los mismos en las mejores condiciones". Además, el alcalde hizo un llamamiento "a la prudencia, porque no podemos actuar en este tipo de viario hasta que no hace buen tiempo, para que el arreglo que se hace perdure".

También, explica que "cada año se puede proceder al arreglo integral en aquellos caminos que el ejercicio anterior no han sido objeto de subvenciones públicas porque no nos lo permite la normativa". "Sin embargo estos son incluidos dentro del cupo de mantenimiento con recursos propios del Consistorio, al que también destinamos una importante cantidad", añade.

De esta manera, se está actuando en Cumbres del Horcajo para mantenimiento habitual, por 15.000 euros, con el objetivo de mejorar el firme de los caminos que han sufrido deterioro por la climatología o el elevado tránsito que soportan. Este año se ha modificado la estrategia, ya que se va a proceder a la reparación en dos momentos diferentes del año, ya que hasta ahora se hacía solo en el periodo previo a las campañas del tomate y de la uva, "duplicando además el presupuesto para ello, hasta los 30.000 euros".

Para concluir, el alcalde recuerda a los usuarios la necesidad de hacer un buen uso de los caminos rurales, incidiendo en que no se puede ocupar espacio público con el vallado porque se va estrechando el firme y tapando los desagües. "Por muchos arreglos que se realicen, si taponamos la vías por las que tiene que transcurrir el agua cuando llueve, estamos evitando que el arreglo que hacemos con recursos públicos del Ayuntamiento o canalizando subvenciones para ello se mantenga, en cuanto caen tres gotas de agua se vuelven a deteriorar", señala.