El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha explicado este jueves en el Congreso que "el sector público español mantiene la deuda más alta de su historia" —está por encima del billón de euros, toda la actividad económica del país en un año— y se marca como "obligación"  para la legislatura recién estrenada "reducirla para poder fortalecer el crecimiento económico de nuestro país".

Montoro durante cu comparecencia en la comisión del ramo para exponer las políticas que pretende llevar a cabo ene sta legislatura, ha hecho hincapié en la importancia de reducir la deuda pública por una cuestión de confianza de los mercados.

"La mitad de la deuda publica emitida por el Estado la tienen inversores extranjeros", ha apuntado Cristóbal Montoro. "Esto viene a decirnos que tenemos una deuda frente al resto del mundo, pero también que el resto del mundo confía en España porque compra nuestra deuda pública. Y eso es un signo muy positivo".

Montoro ha añadido que la otra deuda del país, el endeudamiento privado, "se redujo en entre 400.000 y 450.000 millones" en la pasada legislatura. De ellos, dos terceras partes ha procedido de las empresas financieras y cerca de 200.000 millones de las familias. "Se ha reducido a costa de incrementar la deuda pública, como ha sucedido con el rescate de los bancos con dinero público", le ha afeado el portavoz socialista, Pedro Saura.

"La legislatura tiene un mejor aspecto que la anterior y el objetivo es tener 20 millones de ocupados, que es cuando podremos decir que la crisis ha quedado enterrada en nuestro país, ha añadido Montoro, que ha acudido a la Cámara a petición propia y de los grupos Socialista, de Ciudadanos, de ERC, PNV y del Grupo Mixto, después de que su comparecencia en la Cámara quedase pendiente desde antes de Navidades. Pero antes, según el ministro, hay que cuadrar las cuentas. Y solo este año hay que rebajar el déficit público del 4,6% al 3,1%.

"Son 16.000 millones de euros y es a lo que nos hemos comprometido con las instituciones europeas", ha dicho Montoro, que cree que 2017 será "el año más difícil" de la próxima legislatura, en la que se "aspira a terminar con equilibrio presupuestario para 2020". Precisamente este jueves Europa Press avanza que Bruselas se pronunciará el próximo 26 de enero sobre el plan presupuestario español, que incluye una recaudación extra de 7.000 millones.

Montoro defiende que "el gasto publico debe incrementarse a menor ritmo que la actividad económica" para poder reducir el déficit por debajo del 3% y salir así de los procedimientos de corrección de déficit excesivo que impone Bruselas a los países incumplidores. "De este modo estaremos sometidos a una vigilancia inferior y ganaremos capacidad de acción de política nacional", dice el ministro.

Insiste Montoro en que el país no se enfrenta ahora al "desafío de reducción del gasto de 2012, cuando se redujo en 22.000 millones el gasto en las Administraciones" y defiende que "no se ha descuidado la protección social", porque el gasto en Sanidad y Educación se incrementó el año pasado en 4.789 millones, alcanzando más de 300.000 millones, la mayor cifra contabilizada hasta la fecha.

Pero la oposición le reprocha que el descuido se está produciendo en los ingresos. "La recaudación es ocho puntos inferior a la media de la UE", la ha afeado el socialista Pedro Saura, mientras que su homólogo de C's, Francisco de la Torre, le ha echado en cara que con "3.000 personas menos ahora en la Agencia Tributaria que en 2011, es complicado lograr los mismos resultados en lucha contra el fraude de otros países".

No es así como lo ve Montoro, que adelanta que la recaudación en 2016 de IRPF (72.000 millones) e IVA (62.900) cerraró por encima de los niveles de 2007. El proyecto del Gobierno, según Montoro, es llevar adelante "una reducción del IRPF y otras medidas con impacto tributario como la elevación de la vida laboral". Dos medidas que según el ministro ya estaban en su programa electoral.