Los responsables socialistas del área de cultura califican de «habitual» esta práctica «cuando las partes gozan de una excelente relación». Por contra, los grupos de oposición PP y CHA hablan de escándalo y han reclamado informes a la Intervención Municipal sobre la fiscalización de ésta y otras actuaciones programadas para las Fiestas del Pilar.

Además de no percibir compensación, el Ayuntamiento tiene que devolver ahora el importe de las entradas vendidas, a 24 euros cada una. El concierto, programado en la carpa de Valdespartera, podría haber reunido hasta 15.000 espectadores, sin contar con cobertura legal alguna.

Michel Zarzuela, responsable de la sociedad Zaragoza Cultural, encargada de la programación festiva, reconoció ayer en la comisión municipal de Cultura y Educación que eran habituales las actuaciones sin mediar contrato.

Se da la circunstancia que Zaragoza Cultural ha acumulado en los últimos años grandes déficit, «porque programa las fiestas sin ninguna previsión contractual y presupuestaria, y luego el Ayuntamiento tiene que cubrir los dispendios», denunciaron desde CHA.

El PP habló de «irregularidades» en la gestión de las fiestas y reclamó todos los contratos del Pilar. También se preguntó: «¿con cargo a qué se pensaba pagar el concierto si no había contrato o factura firmada?»