Tras detectar una gran cantidad de robos que se venían cometiendo en casetas de campo en la que se utilizaba el mismo modus operandi, la Guardia Civil puso en marcha una investigación que permitió intervenir varios enseres entre los que se encontraban una bicicleta de montaña, 24 gramos de cogollos de marihuana y 30 kilogramos de cobre en una nave abandonada de dicha localidad.

Como resultado de las inspecciones oculares realizadas en los lugares de los robos se obtuvieron evidencias y vestigios pertenecientes a los detenidos, según ha explicado la Guardia Civil en una nota.

Con la investigación llevada a cabo por el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Tudela, se dan por esclarecidos un total de 45 robos en casetas de campo de las que los detenidos presuntamente sustrajeron diversos efectos (comida, bebida, cafeteras, bicicletas, herramientas, muebles, televisores, entre otros) por valor de 30.000 euros aproximadamente, además de cometer un delito de usurpación de inmueble.