17 años de cárcel para la acusada de matar a su bebé recién nacido

  • La mujer padece un trastorno de personalidad.
  • La imputada simuló ante su familia que iba al ginecólogo.
  • También minió sobre su trabajo.

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a 17 años y medio de prisión a María del Carmen R.A, que padece un trastorno de personalidad, por asesinar a su bebé recién nacido en la casa de su madre el 22 de diciembre de 2005, informaron hoy a Europa Press fuentes jurídicas.

Un jurado popular declaró a la mujer, de 38 años, culpable de un delito de asesinato por acabar con la vida de su hijo después de propinarle varios golpes. Por estos hechos, la Fiscalía de Madrid solicitó 20 años de cárcel para ella por asesinato, con la agravante de parentesco.

Pese a que María del Carmen sufre un trastorno mental, la sentencia subraya que esta patología "no le evita comprender para actuar de forma dolosa". Esta enfermedad "no compromete la voluntad de la persona", sentencia el tribunal, que añade que "la muerte violenta del bebé no estuvo condicionada" por su trastorno de personalidad.

Mentira tras mentira

De las sesiones del juicio se desprendió que la condenada simuló ante su familia durante los meses previos al embarazo que acudía a la consulta ginecológica. Uno de los policías encargados de la investigación manifestó entonces que los supuestos doctores que la atendieron tanto en la clínica del Rosario como en la San Camilo no existían, al no estar sus datos registrados en sendos centros sanitarios.

"A las ocho de la mañana salía, cogía el tren y en teoría se iba a trabajar".
Además, José Luis R.G,
el que fue su pareja y padre del niño, relató que durante meses la procesada le engañó
con que trabajaba en un despacho de abogados. "A las ocho de la mañana salía, cogía el tren y en teoría se iba a trabajar", dijo.

En su declaración, María del Carmen sostuvo que el día de los hechos sentía "fuertes dolores en el estómago" y acudió al baño, de escasos metros, sin tener conocimiento de que estaba de parto.

La procesada explicó a los once miembros del tribunal de jurado que tras dar a luz al bebé perdió el conocimiento. Frente a su relato, la fiscal le preguntó si pudo haber "pisado" al bebé, una vez que se desmayó, a lo que ésta contestó que no se acordaba.

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