Los hechos tuvieron lugar sobre las 1.16 horas de este martes, cuando la mujer, acompañada de su pareja, se personaron en un centro de salud exigiendo ser atendidos de inmediato. La joven refería un fuerte dolor en el brazo y quería que la trasladasen en ambulancia a Cabueñes.

La doctora de guardia le explicó entonces que las ambulancias eran servicios de emergencia y que tenía que ir al hospital por sus propios medios. Tanto la mujer como su pareja comenzaron a proferir voces e insultos contra la doctora y a todas las personas que se encontraban en el ambulatorio. Además, la mujer aseguraba que que las personas que había allí le habían sustraído su teléfono móvil y que no iba a parar hasta que se lo devolviesen.

Los policías que se personaron en el lugar trataron de calmar a esta mujer y revisaron las pertenencias de la chica. En su bolso encontraron el teléfono que manifestaba que le habían quitado.

No obstante, una vez se hubo cotejado su número de IMEI con las bases de datos policiales, se constató que ese móvil, valorado en casi 900 euros, no le pertenecía ya que había sido sustraído el pasado mes de septiembre.

La mujer fue arrestada por agentes de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Comisaría de Gijón

por un delito de hurto y también fue denunciada por desobediencia y daños causados al vehículo policial que la trasladó a las dependencias policiales, al que golpeó con puñetazos y patadas. La detenida contaba con numerosos antecedentes policiales por robos de vehículos y falsificación de placas de matrícula.