En un comunicado, el Ejecutivo vasco ha recordado que Sulma Alegría Robles formaba parte de OASIS, entidad con la que el Gobierno vasco tiene relación, ya que su director, Jorge López Sologaistoa, fue acogido en 2014 por el Programa vasco de protección temporal para defensores y defensoras de derechos humanos de la Dirección de Víctimas y Derechos Humanos del Gobierno Vasco.

Tanto Sulma como Jorge, así como otros miembros de la organización, han sufrido "ataques, amenazas y violencia de manera sistemática por defender los derechos humanos", según informes de la Unidad de Protección a Defensoras y Defensores de Derechos Humanos - Guatemala (UDEFEGUA).

El Gobierno Urkullu, además de solidarizarse con el dolor de familiares, compañeras y compañeros de Sulma, ha mostrado su preocupación por la situación de "amenazas, criminalización y estigmatización que padecen las personas defensoras de los derechos humanos en Guatemala", y espera que este asesinato sea objeto de la oportuna investigación y se depuren todas las responsabilidades.