Cassá ha puesto como ejemplo de lo que Málaga necesita el desarrollo de este proyecto en los últimos meses. "Creo que es el modelo de cómo hay que actuar en un proyecto: se toma una determinación política y se deja a los técnicos actuar sin intromisiones. Málaga tiene que superar la trampa de los debates técnicos protagonizados por políticos", ha incidido.

"Basta ya de estos debates estériles que cansan, que desaniman y alejan a la gente", ha afirmado Cassá, al tiempo que ha aplaudido el "cómo se ha llevado este caso", recordando también la moción que Ciudadanos elevó al pleno del mes de septiembre.

En concreto, en la propuesta, la formación naranja abogaba por intervenir en los laterales Norte y Sur pero pedía estudios técnicos sin intromisiones políticas y anunciaba que asumiría el resultado de lo propuesto por los trabajadores municipales que, finalmente, y tras realizarse 1.200 encuestas entre los vecinos, han visto la idoneidad de dejar abierto al tráfico el pasillo central.

"Ya apostábamos abiertamente por peatonalizar los laterales. Es lo más lógico. Permite prolongaciones naturales del Ensanche Heredia y de la Calle Larios y respeta el eje central de la Alameda", ha continuado Cassá, que cree "sustancial que la actuación propuesta no entra en conflicto con las obras del metro".

En este sentido, ha añadido que "permite que cada administración asuma un lateral", ha apostillado. De este modo, la Junta asumirá la zona Norte, en conjunción con las obras del suburbano y el Consistorio, la Sur, cuyos cálculos estimativos cifran las obras en unos ocho millones.

"Apostamos desde un principio por los laterales, pero en nuestra moción dejábamos abierta la solución a lo que los técnicos dijeran. Y así ha sido. Nos gusta la opción que se ha dibujado. Nos gusta que la Alameda vuelva a ser el gran salón de la ciudad y que deje de ser un lugar inhóspito, lleno de barreras para cruzar y convertida en una estación de autobuses al aire libre", ha proseguido.

Asimismo, Cassá espera que este impulso continúe y que se

convierta en modelo de lo que deben ser las actuaciones estratégicas en la ciudad. "Si hay que mover la estatua del Marqués, que se haga. Hay mil fórmulas para acercarla a la calle Larios y para no entorpecer ni el paso de las emergencias, servicios, ni el desarrollo de la Semana Santa. Cualquier problema técnico que se suscite en el recorrido de este proyecto, que se quede en ese ámbito", ha aseverado.

También ha incidido en que lo que hay que hacer políticamente es "apostar decididamente por que este proyecto esté terminado mucho antes del fin del mandato".

"Por nuestra parte, queremos dotación en los presupuestos del año que viene. Queremos avanzar, líneas rectas; Queremos sentido práctico y determinación. Ya se ha consultado con técnicos y vecinos. Sólo nos queda apoyar y no poner palos en las ruedas. Queremos dar paso a un 2017 que sea el de dos grandes proyectos: la Alameda y el Plan Especial del Monte Gibralfaro", ha incidido.

CONTAMINACIÓN

Por su parte, Carballo también se ha mostrado esperanzado en relación con los visos de futuro de esta intervención urbana de calado y ha resaltado que, "además del sumidero de CO2 que supone 'per se' el telón de los ficus centenarios, el asfalto también vaya a ser especial".

Así, ha considerado "apropiado dejar reducidos los carriles centrales a cuatro: dos en dirección Teatinos para vehículos privados y dos para transporte público, uno en cada sentido -los coches, hacia el Este, por Alameda de Colón y Heredia-". Para Carballo, "hay que completar esta actuación en el futuro con la proyectada en el muelle 4".

Otro de los aspectos que C's ve positivos atañe a la dispersión de paradas de autobuses urbanos y al hecho de que, en aquellas líneas en las que sea posible, se opte por trazados circulares y no lineales.

"El hecho de dejar una hilera de árboles para delimitar terrazas también nos parece bien. Debe ser un espacio de lujo para el peatón", ha recalcado, al tiempo que ha subrayado que es un "proyecto que cose, que conecta y que justifica esos ocho millones de euros de inversión calculada".

Por último, ha incidido en que "estos 58.000 metros cuadrados constituyen una oportunidad de oro para que Málaga siga ganando quilates para vecinos y visitantes. Y esta actuación prima el espacio público de calidad. Además, es una situación que encaja con la propia aportada por el proyecto del metro y por el Pepri".