Además, la ciudad se dividirá en cuatro grandes áreas: norte, este, oeste y centro, para pasar "de una distribución por funciones" a una "distribución territorial".

Así lo han explicado en una comparecencia conjunta ante los medios, este jueves, el edil del área Fernando Marcos y el jefe de la Policía Local, José María Conesa.

Marcos ha indicado que el departamento ha perdido 40 agentes por "amortizaciones" de puestos desde 2011 que impiden su recuperación, pero ha señalado que la nueva reestructuración busca tener "más agentes" en la calle para atender al ciudadanos. Así, ha subrayado que se mantendrán las unidades de Partidas Rurales y de Aperturas y se potenciará la policía de barrio.

A ese respecto, Fernando Marcos ha dicho: "lo que tenemos que hacer es reorganizar y que todos sepan hacer de todo. Queremos sacar a cuanta más gente posible de hacer otras funciones que no son de policía". Además, ha indicado que se tratará de ofertar toda la tasa de reposición "posible" para este 2016 y para 2017 y se pondrá en marcha "una bolsa para tener más agentes. El esfuerzo va a ser muy grande para crecer de la mejor forma posible".

Por su parte, José María Conesa ha detallado que el proceso actual es "la segunda fase" de una reestructuración que arrancó hace un año con "la simplifación de unidades". "Ahora pasamos a una distribución territorial" que pretende que "unidades que antes eran más o menos independientes, ahora están integradas en cuatro distritos".

"Cada distrito aumentará la dotación de personal y dentro de ese ámbito vamos a intentar que sea multidisciplinar de manera que en cada distrito haya gente que sea capaz de hacer de todo. Que sean autosuficientes", ha continuado.

"No se va a dejar de atener ningún servicio, aunque el servicio cambie de denominación o dependencia", ha agregado y ha asegurado que se está haciendo "un esfuerzo muy grande" para cuadrar a "casi 600 agentes".