Sin embargo, según ha informado el Ayuntamiento castreño, "tras la resolución de Alcaldía, que entiende que el Consistorio debe hacer cuanto pueda para que las necesidades básicas no supongan un coste significativo para sus vecinos", el Ayuntamiento de Castro ha dado a conocer a los vecinos que en sus recibos "no repercutirá la subida de la tasa del agua en alta prevista por la institución provincial".

El alcalde de la localidad, José Luis Caravaca (IU), ha subrayado que "asumir la gestión directa del agua en 2011 ha supuesto una mejora en la calidad del servicio y va a permitir al Ayuntamiento asumir este coste, para que no repercuta en el bolsillo de los vecinos. De esta manera el servicio es más cercano y permite hacer inversiones que después repercuten directamente en nuestros vecinos".

Caravaca ha indicado que el Ayuntamiento trata de responder a un modelo de gestión "social, solidario y eficaz en su labor cotidiana", y ha recordado que debido a la gestión realizada "está siendo posible mejorar las infraestructuras, ayudar a los vecinos, que tienen a disposición maquinaria municipal, como un detector de fugas, y realizar mejoras, como la adquisición de un clorador automático".

De este modo, el Ayuntamiento dicho a los vecinos del municipio que, "pese a la subida aprobada provisionalmente en la Diputación, el precio del agua en sus recibos continuará siendo el establecido hasta el momento por el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), que oscila entre 0,45 y 1,50 euros el metro cúbico, según la cantidad consumida al trimestre. El Ayuntamiento asumirá, por tanto, un diferencia de entre nueve y 30 céntimos por metro cúbico".