La decisión de la aerolínea se debe a que la ruta no ha tenido "la aceptación que se esperaba y deseaba".

Desde el anuncio de la medida y hasta ahora, los vuelos entre la capital cántabra y la francesa se han operado "con normalidad", de modo que la suspensión de los vuelos entre el aeropuerto Seve Ballesteros y el Charles de Gaulle coincide con el inicio de la temporada de invierno en términos aeronáuticos.

Pero desde el anuncio, a principios de septiembre, Vueling empezó a ponerse en contacto con los viajeros afectados por la cancelación de los vuelos Santander-París, que empezaron a operarse el pasado mes de mayo, con dos frecuencias semanales, los martes y los jueves, y que estaban previstos para todo el año.

Así, el martes 1 de noviembre ya no habrá vuelos entre ambas ciudades.