Alberto tiene 28 años y vive en un paraje pantanoso muy próximo al mar Caribe, que él sueña con visitar algún día. Sin embargo, la distonía, el trastorno neurológico que lo mantiene postrado en su cama bajo la protección y los amorosos cuidados de su madre, Rosa, le impiden cumplir ese propósto.

A pesar de ello, Alberto no renuncia a su anhelo y su ácido sentido del humor y su creatividad ayudan a que madre e hijo reúnan la fuerza necesaria para sobrellevar la situación. Alberto disfruta además de la compañía de su vecina Giselle, quien le trata con mucho afecto, hasta el punto de aflorar una situación que Rosa se decide a zanjar, preocupada por los sentimientos de su vástago y por viejas rencillas con la madre de Giselle.

Para desgracia de Alberto, la vida que imagina con quien desearía fuera su amada, está fuera de su alcance, al igual que ese mar que pretende visitar. Mientras la angustia se apodera de él, Rosa revive su pasado para aligerar la carga de su hijo y conseguir que sus sueños se cumplan.

Oriundo de Bogotá, Manuel Cruz ha sido uno de los actores más conocidos de su país desde que debutara a la edad de seis años. Empezó a estudiar guión y dirección cinematográfica en 2010 con el objetivo de complementar su talento como intérprete con la narración de sus propias historias.

Tras realizar cinco cortometrajes, decidió que había llegado el momento de acometer su primer largometraje como director, 'La ciénaga - Entre el mar y la tierra', con altas dosis de ternura.

Por su parte Carlos del Castillo, director y productor de la Escuela de Cine de Nueva York muy centrado en el simbolismo, los efectos audiovisuales, el guion y la dirección de fotografía, se graduó en Arte Dramático y ha dirigido 25 montajes teatrales en escenarios de Sudamérica.

A lo largo de 20 años, ha visitado alrededor de 60 lugares para poner en marcha diversos proyectos audiovisuales. En 2004 puso en marcha la productora Photogroup Films en Colombia. 'La ciénaga - Entre el mar y la tierra' es su primer largometraje como director.