La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha señalado que uno de los objetivos que pretende implantar para la capital es la "política de los cuidados" para atender a los individuos, al tiempo que ha defendido su discurso "buenista" dado que para poder aplicar ese cometido se requiere tener "buenas personas" en las instituciones.

"Me reprochan que tengo un discurso buenista, lo preocupante sería que fuera malista", ha comentado con ironía Carmena para reivindicar sus planteamientos sobre las políticas de los "cuidados" pues opina que el Madrid del futuro debe ser "capital de la paz", "diverso", donde el individuo pueda desarrollarse y en la que se corrijan desigualdades entre los diversos distritos.

Así lo ha manifestado este miércoles durante su intervención en el ciclo de conferencias organizada por la Universidad Pontificia de Comillas, para recalcar que la "política de las ciudades" se basa en varios ejes, como el tener al "individuo" en el proceso de "salida y llegada" de las políticas para trabajar por las personas concretas, la transversalidad en las políticas y la "hibridación".

Uno de los retos para el futuro para las ciudades, según ha señalado la regidora, es evitar la violencia en sus diferentes formas, para lo cual cree que un factor importante es saber "controlar" las confrontaciones y desterrar "todos los reductos del sectarismo".

En su discurso, Carmena ha reflexionado sobre las ciudades y su futuro, un planteamiento que tiene Naciones Unidas en su foro 'Habitat', que analiza por un lado la situación que atraviesa el continente africano, que se "desborda", o las urbes de los países occidentales, donde los individuos se están "empoderando" para desarrollar su "proyección personal", que está "rompiendo los moldes de las estructura democráticas" que se conocían hasta ahora.

Tras indicar que en este primer tercio de siglo XXI se están viviendo "actos trascendentes", Carmena ha apuntado que el equipo de Gobierno que dirige tiene la "necesidad de combatir la desigualdad" porque "Madrid es dolorosamente desigual" dependiendo de los distritos.

También ha asegurado que el derecho a la vivienda "debe ser ejercitable" y favorecer que sea así para las personas con menos recursos y crear "fondos" a partir de los presupuestos "de nivelación", citando en ese sentido el programa MadRe de rehabilitación de edificios.

Además, la alcaldesa ha asegurado que son necesarios emprender "grandes procesos de inclusión" pues "luchar por la inclusión es luchar por el progreso", junto a la necesidad de "gobiernos transparentes y participativos".

Preguntada por su opinión sobre si considera que las creencias religioso en la esfera pública, Carmena ha dicho que eso "depende de los ciudadanos" y ha puesto como ejemplo que ella, que no tiene creencias religiosas, ha participado en actos de carácter religioso "porque muchos madrileños lo quieren". "Lo hago por respeto y sin hipocresía ninguna", ha concluido.