El detenido, de 32 años y nacionalidad española, había sido usuario del gimnasio donde interpuso la queja. Para ello, el agente de seguros cumplimentó el formulario correspondiente empleando la filiación de uno de sus clientes, cuyos datos personales figuraban en los ficheros informáticos de la empresa.

Las pesquisas comenzaron con la denuncia presentada por un ciudadano a raíz de haber recibido una carta certificada de la Delegación malagueña de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, en relación con una reclamación contra un gimnasio del que el denunciante nunca había sido cliente, según ha informado la Policía Nacional a través de un comunicado.

Los agentes que se hicieron cargo del caso identificaron a un exusuario del centro deportivo como la persona que había presentado la reclamación. Al parecer, este cliente tuvo problemas con el responsable del gimnasio antes de causar baja en el mismo y, posteriormente, trató de interponer una reclamación anónima contra el establecimiento en la Oficina de Consumo.

Ante la imposibilidad de efectuar reclamaciones anónimas, el investigado tomó un formulario y, más tarde, lo rellenó y firmó con los datos de un cliente de la compañía de seguros para la que trabaja. La filiación del denunciante fue tomada de los archivos informáticos de la aseguradora.

Según las indagaciones, el investigado falsificó los documentos obtenidos en la Oficina de Consumo y los cumplimentó con los datos de un cliente de la aseguradora por miedo a posibles represalias del entorno del gimnasio. El agente de seguros ha sido detenido por su presunta implicación en los delitos de falsedad documental y revelación de secreto.