El alcalde ayamontino, en declaraciones a Europa Press, ha asegurado que los que sí lo han notado algo más han sido "los compañeros portugueses" ya que "son los españoles los que cruzan más la frontera hacia localidades como Tavira o Faro" por lo que según le han comentado sus "compañeros" al otro lado de la frontera, "sí que se ha notado más en sentido contrario" aunque "tampoco en demasía".

Según ha precisado Alberto Fernández, el mayor problema que tiene el peaje para los españoles "no es el precio si no el método de pago" que es "muy diferente al que estamos acostumbrados los españoles" y eso es lo que genera cierto "rechazo" a la hora de viajar por la Vía Do Infantes.

Por todo ello, desde Portugal, ha asegurado el alcalde ayamontino, hay iniciativas al otro lado de la frontera para pedir al gobierno portugués que se busque "una vía más parecida al sistema de pago en las autopistas que tenemos en España" para que la fluidez del tráfico entre España y Portugal recupere las antiguas cifras.

Según señala Fernández, las encuestas de satisfacción que el Gobierno portugués ha realizado para observar el comportamiento del usuario de la A-22 indica en cuanto a los españoles que "la insatisfacción no la da el precio del peaje sino la fórmula de pago" y es por ello que se está trabajando en ese ámbito desde los municipios al otro lado de la frontera.

Según la orden ministerial del Gobierno de Portugal que tiene vigencia desde el pasado 1 de agosto, se reducido el precio del peaje en un 15 por ciento entre las 8,00 y las 20,00 horas y un 30 por ciento por la noche y se ampliaban además los descuentos ya existentes para los vehículos pesados y de mercancías.

UNA REDUCCIÓN DEL TRÁFICO DEL 61% TRAS EL PEAJE

La puesta en marcha del peaje en la A-22 supuso en su momento una drástica caída del tráfico rodado en esta vía que une Portugal con España hasta llegar al puente internacional de Ayamonte sobre el río Guadiana. Un estudio realizado por CCOO reveló cifra de caídas del tráfico rodado del 61 por ciento en dicha autovía.

En el estudio, el sindicato señalaba como "muy negativo" el impacto que el peaje ha tenido en el ámbito económico y social de la provincia, y denunciaba que "las consecuencias de esta medida se han visualizado especialmente en el frenazo de la tendencia alcista que hasta hace unos años había en el importaciones y exportaciones entre Huelva y el Algarve, y que afectan directamente en el desarrollo económico de ambos territorios".