En una nota de prensa, la Consejería ha detallado que la realización de la prueba no será necesaria para obtener el título de Bachiller para el alumnado que cursa este año académico el segundo curso de esta enseñanza.

Además, otras de las características acordadas para la reválida es que el diseño básico de la prueba le corresponde al Ministerio de Educación, en la reunión ambas partes han lamentado ha lamentado el "retraso" del Ministerio de Educación que "aún no ha publicado" una Orden ministerial para regular esta prueba.

La última de las decisiones tomada hoy encarga a la Universidad de la elaboración material de las pruebas, "con la participación de profesorado de los cuerpos docentes de Enseñanza Secundaria", y conforme a las normas que dicte el Ministerio. Asimismo, el centro académico asumirá también de la organización de los procesos necesarios para que el alumnado pueda realizar la prueba con todas las garantías, como ha venido sucediendo hasta la fecha con la extinta 'selectividad'.

Próximamente se constituirá una comisión de coordinación con el fin de regular los distintos aspectos técnicos de la prueba y su calendario.

Desde la Consejería y la Universidad han transmitido con este acuerdo "un mensaje de tranquilidad a la comunidad educativa asturiana" y, además,

"garantizar que el alumnado de 2º de Bachillerato realizará una única prueba para su admisión en la Universidad".

En esta reunión de trabajo han asistido también la directora general de Universidades e Investigación, Cristina Valdés; el director general de Ordenación Académica e Innovación Educativa, Francisco Laviana, y la vicerrectora de Estudiantes de la Universidad de Oviedo, Elisa Miguélez.