Una de las mejores opciones para disfrutar de cualquier tarde de la semana es recorrer alguna de las excelentes cafeterías y chocolaterías de Palma. En ellas se puede degustar los dulces más típicamente mallorquines, como la archiconocida ensaimada, el gató de almendra o las cocas de patata.

Sin duda, una de las visitas imprescindibles es Can Joan de S'Aigo, un establecimiento con historia, ya que fue inaugurado en el siglo XVIII y desde entonces lleva abierto en la misma ubicación, el casco antiguo de Palma. Su decoración, en estilo antiguo mallorquín, no pasa desapercibida. Llamativas lámparas de vidrio, mesas de mármol y sillas de madera antigua dan al local un ambiente muy acogedor que anima a la buena conversación.

Su chocolate y ensaimada, fabricada en su propio horno, son de las mejores de toda la Isla, algo que hace inevitable que el local esté siempre lleno. Son habituales las colas, pero la espera sin duda merece la pena. Para los más previsores, es posible y recomendable realizar reserva previa.

Un rincón para adictos al dulce

Otra opción para los ‘fans' del buen desayuno o merienda es la cafetería Can Ignasi de Pollença, situada en el Paseo Mallorca, en pleno centro de la ciudad. En invierno, el interior del local es ideal para disfrutar de dulces tradicionales como los ‘cuarts' o las duquesas de requesón. En verano, la terraza se convierte en un lugar de reunión más que agradable en la que disfrutar de éstas y otras ‘delicatessen'.

Como curiosidad, los lunes por la tarde se puede pagar un precio fijo con el que se puede tomar todo el chocolate con ensaimada que se desee.

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