En el acto inaugural de la Feria de Cedrillas (Teruel), que también tiene carácter industrial y agrícola, ha puesto el acento en la ganadería y en las razas autóctonas, porque "no sólo son un patrimonio genético, sino también cultural, son el reflejo de nuestra adaptación al medio a lo largo del tiempo".

Olona ha agradecido la paciencia de los ganaderos que han tenido que esperar a que las ayudas para estas razas autóctonas también fueran adaptadas a la nueva realidad legal, pero ha señalado que gracias a esa adaptación que se ha realizado en su Departamento ahora se puede afirmar están seguras: "Incluidas en el Programa de Desarrollo Rural, como están ahora, tienen, además, seguridad jurídica".

No obstante, ha puntualizado que el objetivo "no debe ser cobrar las ayudas", sino que estas sean una herramienta para conseguir "conservar y mejorar los animales y que estos se conviertan en un instrumento de desarrollo rural". Ha remarcado que las subvenciones siempre deben tener como contrapartida la aportación de "valor añadido" por parte del que las recibe.

Olona ha asegurado que Gobierno de Aragón quiere contribuir a la conservación de las razas autóctonas, pero que esto se debe hacer con "inteligencia" y en el marco de las exigencias legales, pues se trata de gestionar fondos públicos.

"Si el objetivo solo es cobrar las ayudas y no sabemos explicar bien qué valor añadido generan esas ayudas, lo que termina ocurriendo es que corren el riesgo de desaparecer", ha indicado.

Con respecto a la Feria, ha dicho que estos certámenes deben servir para trasladar a la sociedad la certeza de que la agricultura y la ganadería se basan en la innovación, como se puede comprobar en Cedrillas.