En una nota, la Junta ha explicado que los trabajos supondrán la retirada de las cubiertas de fibrocemento existentes e incluirán también otras actuaciones de adecuación y modernización de las instalaciones del colegio.

El delegado territorial de Educación en Cádiz, Juan Luis Belizón, ha apuntado que, con este anuncio, la Delegación "cumple con la hoja de ruta que acordó con el Consejo Escolar del CEIP Reggio", que pasaba por "la retirada del fibrocemento en dos zonas

concretas del centro, siguiendo las indicaciones de los informes de la Unidad de Prevención de Riesgos Laborales de la propia Delegación, el de Salud Pública y el de la Agencia de Medio ambiente y Aguas".

Según ha apuntado, a esto se le suma "la realización de nuevos análisis y la integración del colegio en el plan de retirada de amianto de la Junta de Andalucía de manera prioritaria, asumiendo también su reforma y mejora integral". Ha dicho que este último compromiso se tomó debido a la "ausencia de mantenimiento a la que ha sido sometido el centro por parte de las autoridades municipales en los últimos años".

La Delegación, por tanto, "se ha adelantado al compromiso adquirido", ya que en un principio se indicó que este anuncio se haría en octubre y aún no ha finalizado el mes de septiembre. El procedimiento ha seguido los pasos administrativos requeridos para este tipo de intervenciones.

Al respecto, ha apuntado que "todos estamos de acuerdo en la retirada de los techos en el CEIP Reggio, pero hay que respetar los procedimientos que exige la ley y sus tiempos de aplicación".

CARACTERÍSTICAS

Según ha explicado la Junta, esta contratación cuenta con un presupuesto de 54.626,42 euros y tiene como finalidad la redacción del proyecto para la obra de la sustitución de las cubiertas del CEIP Reggio, así como la reforma y mejora de fachadas, espacios interiores y urbanización en la zona central del complejo escolar, alrededor del edificio de primaria y el salón de actos. La obra contará con un presupuesto estimado de medio millón de euros.

Además de la instalación de nuevas cubiertas, los trabajos abordarán la reforma de los aseos del alumnado ubicados en la planta baja del edificio docente, la sustitución de algunas puertas y ventanas, la reparación de fisuras en fachadas y eliminación de humedades.

Asimismo, se acometerá la mejora de acabados interiores, además de la reforma integral de la instalación eléctrica y trabajos de pintura exterior en el edificio destinado a primaria y el salón de actos.

El proyecto incluye también la adecuación de patios y la creación de una nueva red de saneamiento que mejore la evacuación de aguas pluviales, la mejora del acabado de la solera del porche, la instalación de nuevas fuentes individuales y mejoras en la accesibilidad al centro.

Esta nueva intervención se suma a los trabajos ya ejecutados este verano en el CEIP Reggio, finalizados el pasado 29 de agosto, que han permitido la retirada urgente de placas de fibrocemento del porche y un cobertizo. Las obras han supuesto la sustitución de las cubiertas de ambos espacios por otras de paneles tipo sándwich.

Esta actuación forma parte de la planificación de la retirada progresiva del amianto en las infraestructuras públicas educativas aprobada por el Gobierno andaluz el pasado 5 de julio de 2016 para el período 2016-2022. Este plan, que está dotado con 60 millones de euros, se lleva a cabo por la Consejería de Educación, través de la Agencia Pública Andaluza de Educación, adelantándose así al plazo estipulado por la Unión Europea para la puesta en marcha de planes nacionales, en 2028.

Este programa se desarrollará en dos etapas. La primera, entre 2016 y 2020 y con un coste de 40 millones, tendrá como objetivo elaborar un registro de instalaciones, tanto de titularidad municipal como autonómica (escuelas infantiles, colegios de Infantil y Primaria, institutos de Educación Secundaria, centros de Educación Especial, Escuelas Oficiales de Idiomas, centros de enseñanzas artísticas y residencias escolares).

La segunda etapa, a desarrollar entre 2021 y 2022 y con un coste estimado de 20 millones, se centrará en el resto de instalaciones afectadas.

Las firmas encargadas de la retirada del material deberán pertenecer al registro de empresas con riesgo por amianto. Asimismo, el plazo y los recursos asignados a cada intervención dependerán de la conservación y vida útil del material evaluado, de su dimensión, de su mayor o menor accesibilidad y de si requiere o no material de reposición.