Se trata del quinto mayor descenso de las hipotecas a nivel nacional que cayó en todas las autonomías con la excepción de Cataluña (0,9 por ciento).

En comparación con el mes anterior la evolución de las hipotecas constituidas sobre viviendas también fue negativa en Castilla y León (-29,2 por ciento), en este caso el sexto peor dato a nivel nacional que alcanzó una media del -26,0 por ciento y cayó en todas las autonomías.

Por su parte, el capital prestado en Castilla y León para la constitución de hipotecas sobre viviendas ascendió a 62,73 millones de euros, un 22,9 por ciento menos que en julio de 2015, frente a un 6,3 por ciento menos en España. En comparación con el mes anterior se ha producido un descenso del 30,5 por ciento (-24,0 por ciento en el resto del país).

En total y según los datos aportados por el INE, los ciudadanos de Castilla y León hipotecaron durante el mes de julio 1.214 fincas, tanto rústicas como urbanas, por valor de 131,54 millones de euros. En concreto, se hipotecaron 1.115 fincas urbanas por un valor de 123,17 millones de euros y se constituyeron 99 hipotecas de fincas rústicas por 8,36 millones de euros.

Valladolid fue la provincia en la que se hipotecaron más fincas en julio de 2016, con un total de 317 por un valor de 40,66 millones. Le siguen Burgos (248 fincas por 25,19 millones), Segovia (152 fincas por 13,27 millones), León (118 fincas por 15,82 millones) y Salamanca (113 fincas por 12,36 millones).

Por debajo de las 100 fincas hipotecadas se situaron el resto de las provincias de Castilla y León: Ávila (82 fincas por 7,50 millones), Palencia (81 fincas por 5,68 millones), Zamora (72 fincas por 7,62 millones) y Soria (31 fincas por 3,41 millones).

En concreto, de las 1.115 fincas urbanas hipotecadas ese mes 704 eran viviendas, por un capital de 62,73 millones de euros; 98 eran solares, por un capital de 17,38 millones de euros, y 313 eran catalogadas como "otras urbanas", por 43,06 millones de euros.

El mayor capital de las fincas urbanas hipotecadas en julio correspondió a los bancos (107,67 millones correspondientes a 995 fincas hipotecadas), seguidos de las otras entidades (15,50 millones correspondientes a 120 fincas).

Por su parte, el mayor capital de las fincas rústicas hipotecadas en julio de 2016 correspondió a los bancos (5,49 millones correspondientes a 34 fincas hipotecadas), seguidos de las otras entidades (2,87 millones correspondientes a 65 fincas).

Por último, en julio de 2016 se cancelaron registralmente en Castilla y León un total de 1.892 fincas (82 fincas rústicas, 1.148 viviendas, 43 solares y 619 "otras urbanas").