Feijóo se ratifica como líder con su tercera mayoría absoluta, la única del Estado, y En Marea adelanta al PSOE

  • SANTIAGO DE COMPOSTELA, 26 (EUROPA PRESS)

Alberto Núñez Feijóo ha logrado lo que él mismo denominó un "sueño" antes de que arrancase la campaña electoral. No sólo ha conseguido su tercera mayoría absoluta desde que, por primera vez, arrebató al bipartito de la Xunta, sino que se ha convertido en el único líder de todo el Estado (al margen de ayuntamientos) en lograr una mayoría absoluta, evitando así tener que buscar apoyos de otros partidos para la investidura, como pretendía Ciudadanos.

Y lo ha hecho refrendando su amplia mayoría de la novena legislatura, cuando consiguió 41 diputados, quedándose a dos del techo de Manuel Fraga, que en el año 1993 consiguió 43. Con el 99,85% escrutado, el PP ha conseguido ampliar el porcentaje de votos conseguido en 2012, al situarse con el 47,5% de los sufragios, frente al 45,8% de los anteriores comicios, aunque falta por computar el voto de los residentes ausentes. Además, tras haber perdido más de 150.000 papeletas en la novena legislatura, los populares con Feijóo ya superan con este porcentaje escrutado en más de 14.000 las conseguidos en 2012.

Todavía falta por computar el voto del Censo de Residentes Ausentes (CERA), al respecto de lo que han solicitado 17.871 personas, el 4% del censo (frente al 7,68% de 2012) y no será determinante en el resultado.

Por su parte, el PSdeG, con Xoaquín Fernández Leiceaga, se queda con el peor resultado en la historia democrática de Galicia, con un 17,88% de los votos emitidos este domingo, en que la participación ha sido del 63,75%, a falta de computar el voto de los emigrantes y se deja con este escrutinio unos 43.000 votos. Así, En Marea, liderada por Luís Villares, adelanta a los socialistas con 19% de los sufragios, aunque ambas formaciones se quedan con 14 diputados en el hemiciclo gallego.

Mientras, el BNG de Ana Pontón logra, con el 99,85%, seis diputados y un porcentaje de votos del 8,3%, frente al 10,11% de 2012, cuando logró 7 escaños y casi 28.000 votos más. Pese a que supone un retroceso, la irrupción de las mareas en 2015 supuso la desaparición del Bloque del Congreso de los Diputados en las dos últimas citas electorales, por lo que este resultado le permite pensar que ha comenzado su recuperación.

Ciudadanos, con un 3,37% y 48.013 votos, no ha conseguido colarse en el Parlamento de Galicia, en el que el espacio político de centro no tiene representación desde la disolución de la UCD, que consiguió en 1981 un total de 24 escaños en la primera legislatura. De ellos, buena parte acabaron en el PP (antes Alianza Popular) en 1985, que ese año se presentó como coalición electoral y consiguió 34 diputados (aunque una moción de censura desalojó a Gerardo Fernández Albor de la Presidencia de la Xunta).

"ALGO EXCEPCIONAL"

"Aspiramos a algo excepcional en Galicia, dijo el secretario general del PP gallego, Miguel Tellado, en rueda de prensa este domingo, al igual que Feijóo pronosticó que la Comunidad gallega iba a dar "un mensaje a toda España" para otros "cuatro años de estabilidad".

La "excepción", como los populares adelantaron que sería -según sus palabras- una nueva mayoría absoluta en Galicia, se produce en un contexto en el que, casi un año después y tras dos citas electorales (en diciembre de 2015 y junio de 2016), el Congreso no ha logrado investir a un presidente del Gobierno.

La tercera mayoría absoluta ratifica a Feijóo, que desarrolló una campaña eminentemente personalista y con apenas presencia de las siglas de su partido, como líder en el PP y como uno de los nombres indiscutibles de las quinielas sucesorias al actual presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy.

El presidente gallego no se ve afectado, de este modo, por los casos de corrupción que salpican a su partido, que también marcaron la campaña electoral con el caso de la senadora y exalcaldesa de Valencia, Rita Barberá; así como tampoco le pasan factura las fotografías de los años 90 que publicó 'El País' a principios de la pasada legislatura con el contrabandista y después condenado por narcotráfico Marcial Dorado y que la candidata del BNG, Ana Pontón, le espetó en el único debate electoral televisado de esta campaña.

Paralelamente, el presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, que se ha volcado en la campaña gallega con una importante presencia en estos últimos 15 días, podrá emplear este resultado para buscar los apoyos que necesita para ser investido presidente en el Congreso frente a un líder del PSdeG, Pedro Sánchez, que también se entregó en la campaña gallega sin que ahora pueda presentarse siquiera como alternativa al PP en la oposición, a menos de una semana del Comité Federal.

RETROCESO DEL PSDEG

El PSdeG sufre un duro revés al cosechar el peor resultado de su historia en la democracia, tanto en porcentaje de votos, ya que su suelo era del 19,6% en 1981, como en diputados, puesto que el peor dato lo obtuvo en 1997 con 15 escaños.

Ese año, el BNG capitaneado entonces por Xosé Manuel Beiras -ahora referente de En Marea- adelantó también a los socialistas que llevaron como cartel al hoy alcalde de Vigo, Abel Caballero, quien, precisamente, apoyó este año al rival de Leiceaga en las primarias internas y se ha mantenido discreto en esta campaña, tras fuertes discrepancias por la elaboración de las listas.

El PSdeG se ha quedado con un 17,88% de los apoyos en estas elecciones, al lograr 254.156 papeletas, lo que supone una caída de unos 43.000 votos, y pierde cuatro diputados, después de ya haber retrocedido en siete y en más de 244.000 apoyos en los comicios pasados.

ADELANTO DE EN MAREA Y BNG

La bajada del PSdeG va en paralelo a los 14 escaños obtenidos por En Marea, buena parte heredados de la coalición electoral AGE que en 2012 irrumpió con nueve diputados y como tercera política. De aquella todavía no existía Podemos, formación se sumó al apoyo a este partido instrumental con sus inscritos de forma individual pero sin siglas.

Concretamente, En Marea ha cosechado este domingo 25, con el 99,85% escrutado, 267.989 votos, frente a los 200.828 que obtuvo AGE en 2012.

El BNG, que en 2012 ya había acusado las grandes escisiones de principios de ese año al marcharse uno de sus principales referentes, Xosé Manuel Beiras, y después de quedarse sin representación en el Congreso, ha logrado de la mano de Ana Pontón conseguir retener grupo parlamentario con seis escaños y representación por las cuatro provincias, con 118.874 apoyos, frente a los 146.027 de la anterior legislatura.

POR PROVINCIAS

El PPdeG ha ganado en las cuatro provincias gallegas y ha conseguido subir un diputado en Ourense, al obtener 9, como en campaña se había propuesto el barón ourensano, Manuel Baltar; si bien ha perdido uno con respecto a 2012 en la de Lugo, al situarse ahora con 8. En ambas, el PSdeG se ha mantenido como segunda fuerza política, aunque los socialistas retrocedieron en dos escaños en la circunscripción de Ourense y en uno más en la de Lugo.

Por su parte, En Marea desbanca en las provincias atlánticas al PSdeG y logra 5 diputados frente a los 4 de AGE en el año 2012. Además, el partido instrumental arrebata uno a los socialistas en Pontevedra y otro al BNG, al conseguir 5 frente a los tres que obtuvo la coalición de Anova y Esquerda Unida en la novena legislatura.

La pérdida de cuatro escaños del PSdeG se corresponden con uno en Pontevedra, dos en Ourense y uno en Lugo. Por su parte, el BNG cedió un escaño en la provincia de Pontevedra.

Con el 99,85% escrutado, y a falta del voto CERA, han participado el 63,75% de los votantes con derecho, y se han emitido 13.936 votos en blanco un 0,98 por ciento, frente al 2,7% de 2012. Los sufragios nulos suman 14.469, el 1,01%, frente al 2,56% de los comicios anteriores.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento